Reconoce tan solo tu maldad
y que fuiste rebelde contra el Señor tu Dios;
que corriste en busca de amores extraños
debajo de todo árbol frondoso,
y que no obedeciste mis órdenes.
Yo, el Señor, lo afirmo.’ ”
El Señor afirma: “Regresad, hijos rebeldes, pues yo soy vuestro dueño. Tomaré uno de cada ciudad y dos de cada clan, y os haré volver a Sión.