Versículos bíblicos populares de Apocalipsis 16

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«¡Cuidado! ¡Vengo como un ladrón! Dichoso el que se mantenga despierto, conservando su ropa, no sea que ande desnudo y pase vergüenza por su desnudez».

El sexto ángel derramó su copa sobre el gran río Éufrates, y se secaron sus aguas para abrir paso a los reyes del oriente.

Son espíritus de demonios que hacen señales milagrosas y que salen a reunir a los reyes del mundo entero para la batalla del gran día del Dios Todopoderoso.

Y vi salir de la boca del dragón, de la boca de la bestia y de la boca del falso profeta tres espíritus malignos que parecían ranas.

Todos sufrieron terribles quemaduras, pero ni así se arrepintieron; en vez de darle gloria a Dios, que tiene poder sobre esas plagas, maldijeron su nombre.

El primer ángel fue y derramó su copa sobre la tierra, y a toda la gente que tenía la marca de la bestia y que adoraba su imagen le salió una llaga maligna y repugnante.

Entonces los espíritus de los demonios reunieron a los reyes en el lugar que en hebreo se llama Armagedón.