Solamente que con diligencia cuidéis de cumplir el mandamiento y la ley que Moisés, siervo del Señor, os ordenó: que améis al Señor, vuestro Dios, y andéis en todos sus caminos; que cumpláis sus mandamientos, lo sigáis y lo sirváis con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma.