Versículos bíblicos populares de HEBREOS 13

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No améis el dinero. Contentaos con lo que tenéis, porque Dios ha dicho: “Nunca te dejaré ni te abandonaré.”

Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre.

Así que podemos decir con confianza: “El Señor es mi ayuda; no temeré. ¿Qué me puede hacer el hombre?”

No os olvidéis de hacer el bien y de compartir con otros lo que tenéis, porque estos son los sacrificios que agradan a Dios.

Por eso debemos alabar siempre a Dios por medio de Jesucristo. Esta alabanza es el sacrificio que debemos ofrecer. ¡Alabémosle, pues, con nuestros labios!

Que todos respeten el matrimonio y mantengan la pureza de sus relaciones matrimoniales, porque Dios juzgará a los que cometen inmoralidades sexuales y a los que cometen adulterio.

No os olvidéis de ser amables con los que lleguen a vuestra casa, pues de esa manera, sin saberlo, algunos hospedaron ángeles.

Que el Dios de paz, que resucitó de la muerte a nuestro Señor Jesús, el gran Pastor de las ovejas, por la sangre que confirmó su pacto eterno os haga perfectos y buenos en todo, para que cumpláis su voluntad; y que por medio de Jesucristo haga de nosotros lo que le agrade. ¡Gloria para siempre a Cristo! Amén.