JUAN 3:1-8
JUAN 3:1-8 RV2020
Entre los fariseos había un hombre llamado Nicodemo, persona importante entre los judíos, que una noche vino a ver a Jesús y le dijo: —Rabí, sabemos que has venido de Dios para enseñarnos como maestro porque nadie puede hacer estas señales que tú haces si no está Dios con él. Le respondió Jesús: —Te aseguro que el que no nace de nuevo no puede ver el reino de Dios. Nicodemo le preguntó: —¿Cómo es posible que alguien ya viejo vuelva a nacer? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre y nacer? Respondió Jesús: —Te aseguro que el que no nace de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios. Lo que nace de la carne, carne es; y lo que nace del Espíritu, espíritu es. No te extrañes de que te haya dicho: «Os es necesario nacer de nuevo». El viento sopla de donde quiere y oyes su voz, pero no sabes de dónde viene ni a dónde va. Lo mismo ocurre con quien nace del Espíritu.