JOB 26
26
Job#26.1-4 Job insiste, una vez más, en su inocencia. Es probable que el discurso de Job esté en 26.1-4 y 27.1-12.
1-2¡Qué manera de ayudar al débil,
de salvar al que ya no tiene fuerzas!
3¡Qué bien sabes dar consejos
e instruir al ignorante!
4¿Con ayuda de quién has dicho esas palabras?
¿Quién te ha inspirado para hablar así?
Bildad#26.5-14 Bildad: En el texto heb., los vs. 5-14 aparecen como continuación del discurso de Job. Sin embargo, concuerdan mejor con el discurso de Bildad (25.1-6), demasiado corto, y por lo general se consideran continuación de este.
5Los muertos que habitan el mar profundo
tiemblan de miedo en el fondo del mar.
6El sepulcro, reino de la muerte,
no encierra misterios para Dios.
7Dios extendió el cielo#26.7 Cielo: lit. norte (heb. safon). Esta palabra fue originalmente el nombre cananeo del monte Casio, situado al norte de Palestina y, por extensión, llegó a significar norte. Véase Sal 48.2 nota b. sobre el vacío
y colgó la tierra sobre la nada.
8Él encierra el agua en las nubes,
sin que las nubes revienten con el peso;
9oscurece la cara de la luna#26.9 Luna: texto probable. Heb. trono.
cubriéndola con una nube;
10ha puesto el horizonte del mar
como límite entre la luz y las tinieblas.
11Cuando Dios amenaza, tiemblan de miedo
los montes en los que se apoya el cielo.#26.11 Estos montes son los más altos de la tierra.
12Con su fuerza dominó al mar;
con su habilidad derrotó al monstruo Rahab.#26.12 Rahab: Véase 9.13 n.; cf. Is 51.9.
13Con su soplo dejó el cielo despejado;
con su mano mató a la serpiente escurridiza.
14Y esto no es más que una parte de sus obras;
lo que hemos oído es apenas un murmullo.
¿Quién podrá entender su trueno poderoso?#26.14 Cf. Is 55.8; Eclo 43.32; Sab 9.13; 1 Co 2.16.
Actualmente seleccionado:
JOB 26: DHHE
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Job#26.1-4 Job insiste, una vez más, en su inocencia. Es probable que el discurso de Job esté en 26.1-4 y 27.1-12.
1-2¡Qué manera de ayudar al débil,
de salvar al que ya no tiene fuerzas!
3¡Qué bien sabes dar consejos
e instruir al ignorante!
4¿Con ayuda de quién has dicho esas palabras?
¿Quién te ha inspirado para hablar así?
Bildad#26.5-14 Bildad: En el texto heb., los vs. 5-14 aparecen como continuación del discurso de Job. Sin embargo, concuerdan mejor con el discurso de Bildad (25.1-6), demasiado corto, y por lo general se consideran continuación de este.
5Los muertos que habitan el mar profundo
tiemblan de miedo en el fondo del mar.
6El sepulcro, reino de la muerte,
no encierra misterios para Dios.
7Dios extendió el cielo#26.7 Cielo: lit. norte (heb. safon). Esta palabra fue originalmente el nombre cananeo del monte Casio, situado al norte de Palestina y, por extensión, llegó a significar norte. Véase Sal 48.2 nota b. sobre el vacío
y colgó la tierra sobre la nada.
8Él encierra el agua en las nubes,
sin que las nubes revienten con el peso;
9oscurece la cara de la luna#26.9 Luna: texto probable. Heb. trono.
cubriéndola con una nube;
10ha puesto el horizonte del mar
como límite entre la luz y las tinieblas.
11Cuando Dios amenaza, tiemblan de miedo
los montes en los que se apoya el cielo.#26.11 Estos montes son los más altos de la tierra.
12Con su fuerza dominó al mar;
con su habilidad derrotó al monstruo Rahab.#26.12 Rahab: Véase 9.13 n.; cf. Is 51.9.
13Con su soplo dejó el cielo despejado;
con su mano mató a la serpiente escurridiza.
14Y esto no es más que una parte de sus obras;
lo que hemos oído es apenas un murmullo.
¿Quién podrá entender su trueno poderoso?#26.14 Cf. Is 55.8; Eclo 43.32; Sab 9.13; 1 Co 2.16.
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