1 TESALONICENSES 2:4-6
1 TESALONICENSES 2:4-6 Reina Valera 2020 (RV2020)
Al contrario, si hablamos es porque Dios nos aprobó y nos confió el evangelio. No buscamos agradar a la gente, sino a Dios, que es quien examina nuestros corazones. Bien sabéis que nunca nos hemos valido de halagos, ni hay en nosotros avaricia encubierta. Dios es testigo de ello. Tampoco buscamos honores humanos, ni de vosotros ni de nadie. Y aunque podíamos habernos presentado con la autoridad propia de apóstoles de Cristo
1 TESALONICENSES 2:4-6 La Palabra (versión española) (BLP)
si hablamos, es porque Dios nos ha juzgado dignos de confiarnos el evangelio. Y no tratamos de complacer a la gente, sino a Dios, que examina lo más profundo de nuestro ser. Dios es testigo, y bien lo sabéis, de que jamás nos hemos valido de palabras aduladoras, ni hemos buscado astutamente el provecho propio. Como tampoco hemos buscado glorias humanas, ni de vosotros ni de nadie.
1 TESALONICENSES 2:4-6 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Al contrario, Dios nos aprobó y nos confió el evangelio, y así es como hablamos. No tratamos de agradar a la gente, sino a Dios, que examina nuestros corazones. Como sabéis, nunca os hemos halagado con bellas palabras ni nos hemos valido de pretextos para ganar dinero. Dios es testigo de ello. Nunca hemos buscado honores de nadie: ni de vosotros ni de los demás.
1 TESALONICENSES 2:4-6 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Al contrario, hablamos como hombres a quienes Dios aprobó y les confió el evangelio: no tratamos de agradar a la gente, sino a Dios, que examina nuestro corazón. Como sabéis, nunca hemos recurrido a las adulaciones ni a las excusas para obtener dinero; Dios es testigo. Tampoco hemos buscado honores de nadie; ni de vosotros ni de otros.