1 TIMOTEO 5:1-4
1 TIMOTEO 5:1-4 La Palabra (versión española) (BLP)
No trates duramente al anciano. Exhórtalo, más bien, como harías con un padre. Pórtate con los jóvenes como si fueran hermanos. A las ancianas trátalas como a madres, y a las jóvenes como a hermanas, con toda pureza. Toma en consideración a las viudas, siempre que lo sean de verdad. Pero si una viuda tiene hijos o nietos, a ellos toca, antes que a nadie, cuidar con dedicación de su propia familia, correspondiendo así a lo que recibieron de sus progenitores; esto es, en efecto, lo que agrada a Dios.
1 TIMOTEO 5:1-4 Reina Valera 2020 (RV2020)
No reprendas con dureza al anciano, sino exhórtalo como a un padre; a los más jóvenes, como a hermanos. A las ancianas como a madres; a las más jóvenes, con toda pureza, como a hermanas. Honra a las viudas, las que de verdad son viudas. Si alguna viuda tiene hijos o nietos, estos son los primeros que han de aprender a ocuparse piadosamente de su propia familia y a recompensar a sus padres; porque esto es lo honesto y agradable delante de Dios.
1 TIMOTEO 5:1-4 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
No reprendas al anciano; al contrario, aconséjale como si fuera tu padre. Y trata a los jóvenes como si fueran tus hermanos. A las ancianas, trátalas como a tu propia madre; y a las jóvenes, como a tus hermanas, con toda pureza. Ayuda a las viudas que no tengan a quien recurrir. Pero si una viuda tiene hijos o nietos, ellos son los primeros que deben aprender a cumplir sus obligaciones con los de su propia familia y corresponder al amor de sus padres. Esto es bueno y agrada a Dios.
1 TIMOTEO 5:1-4 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
No reprendas con dureza al anciano, sino aconséjalo como si fuera tu padre. Trata a los jóvenes como a hermanos; a las ancianas, como a madres; a las jóvenes, como a hermanas, con toda pureza. Reconoce debidamente a las viudas que de veras están desamparadas. Pero, si una viuda tiene hijos o nietos, que estos aprendan primero a cumplir sus obligaciones con su propia familia y correspondan así a sus padres y abuelos, porque eso agrada a Dios.