2 CRÓNICAS 22:6-12
2 CRÓNICAS 22:6-12 La Palabra (versión española) (BLP)
y tuvo que retirarse a Jezrael para curarse de las heridas que había recibido en Ramot, cuando luchaba contra Jazael, rey de Siria. Ocozías, el hijo de Jorán, rey de Judá, fue a Jezrael a visitar a Jorán, el hijo de Ajab, pues estaba enfermo. Por decisión divina, la visita de Ocozías a Jorán se convirtió en su perdición; apenas llegó, salió con Jorán al encuentro de Jehú, hijo de Nimsí, ungido por el Señor para exterminar a la dinastía de Ajab. Jehú hizo justicia con la dinastía de Ajab, matando también a los príncipes de Judá y a los parientes de Ocozías que estaban a su servicio. Luego mandó buscar a Ocozías, que se había escondido en Samaría; lo apresaron y lo llevaron ante Jehú, que lo mandó ejecutar. Pero, por ser hijo de Josafat, que había seguido íntegramente al Señor, lo enterraron. Y no quedó nadie en la familia de Ocozías capaz de reinar. Cuando Atalía, la madre de Ocozías, supo que su hijo había muerto, se puso a eliminar a toda la familia real de Judá. Pero la princesa Josebá tomó a Joás, hijo de Ocozías, lo apartó de sus hermanos que iban a ser asesinados y lo escondió con su nodriza en el dormitorio. De esta manera, Josebá, hija del rey Jorán, esposa del sacerdote Joyadá y hermana de Ocozías, lo ocultó de Atalía y evitó que lo matara. Joás estuvo escondido con ellos en el Templo durante seis años, mientras Atalía reinaba en el país.
2 CRÓNICAS 22:6-12 Reina Valera 2020 (RV2020)
Y volvió para curarse en Jezreel de las heridas que le habían hecho en Ramot, al pelear contra Hazael, rey de Siria. Y descendió Ocozías hijo de Joram, rey de Judá, para visitar a Joram hijo de Acab en Jezreel, porque estaba enfermo allí. Pero esto venía de Dios, para que Ocozías fuera destruido al ir a visitar a Joram. Tan pronto llegó, salió con Joram contra Jehú hijo de Nimsi, al cual el Señor había ungido para que exterminara a la casa de Acab. Mientras Jehú hacía juicio contra la casa de Acab, halló a los príncipes de Judá y a los hijos de los hermanos de Ocozías, que servían a Ocozías, y los mató. Buscó luego a Ocozías, el cual se había escondido en Samaria. Lo hallaron, lo trajeron a Jehú y lo mataron; pero le dieron sepultura, pues decían: «Es hijo de Josafat, quien de todo su corazón buscó al Señor». Y la casa de Ocozías no tenía fuerzas para retener el reino. Cuando Atalía, madre de Ocozías, vio que su hijo había muerto, se levantó y exterminó a toda la descendencia real de la casa de Judá. Pero Josabet, hija del rey, tomó a Joás hijo de Ocozías, lo escondió de entre los demás hijos del rey, a los que mataban, y ocultó a él y a su nodriza en uno de los aposentos. Así lo ocultó Josabet, hija del rey Joram, mujer del sacerdote Joiada (porque ella era hermana de Ocozías), de la vista de Atalía, y no lo mataron. Seis años estuvo escondido con ellos en la casa de Dios. Entre tanto, Atalía reinaba en el país.
2 CRÓNICAS 22:6-12 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
que regresó a Jezreel para curarse de las heridas que le habían causado en Ramot durante el combate contra Hazael, rey de Siria. Entonces, como Joram estaba enfermo, Ocozías fue a Jezreel a visitarle. Dios tenía dispuesto que Ocozías muriera al ir a visitar a Joram. Apenas llegó, salió con Joram a encontrarse con Jehú, hijo de Nimsí. Pero Dios había escogido a Jehú para que aniquilase a la familia de Ahab. Cuando Jehú estaba haciendo justicia con la familia de Ahab, encontró a los jefes de Judá y a los parientes de Ocozías que estaban a su servicio, y los mató. Mandó buscar también a Ocozías, que se había escondido en Samaria; y lo apresaron, se lo llevaron a Jehú y lo mataron. Pero lo enterraron teniendo en cuenta que era hijo de Josafat, quien había buscado sinceramente al Señor. De esta manera no quedó nadie de la familia de Ocozías que fuera capaz de recuperar el poder real. Cuando Atalía, madre de Ocozías, supo que su hijo había muerto, fue y exterminó a toda la familia real de Judá. Pero Joseba, hija del rey Joram, apartó a Joás, hijo de Ocozías, de los otros hijos del rey a los que estaban matando, y lo escondió de Atalía, junto con su nodriza, en un dormitorio. Así que no lo mataron. Esto lo hizo Joseba, hija del rey Joram, hermana de Ocozías y esposa del sacerdote Joiadá. Y Joás estuvo escondido con ellos en el templo del Señor. Mientras tanto, Atalía gobernó el país.
2 CRÓNICAS 22:6-12 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Por eso tuvo que regresar a Jezrel, para reponerse de las heridas que había recibido en Ramot cuando luchó contra Jazael, rey de Siria. Como Jorán hijo de Acab convalecía en Jezrel, Ocozías hijo de Jorán, rey de Judá, fue a visitarlo. Dios había dispuesto que Ocozías muriera cuando fuera a visitar a Jorán. Tan pronto como Ocozías llegó, salió acompañado de Jorán para encontrarse con Jehú hijo de Nimsi, al que el SEÑOR había escogido para exterminar a la familia de Acab. Mientras Jehú ejecutaba el juicio contra la familia de Acab, se encontró con los jefes de Judá y con los parientes de Ocozías que estaban al servicio de este, y los mató. Luego mandó buscar a Ocozías, que se había escondido en Samaria; pero lo apresaron y lo llevaron ante Jehú, quien ordenó matarlo. Sin embargo, le dieron sepultura, porque decían: «Es el hijo de Josafat, que buscó al SEÑOR con todo su corazón». Y en la familia de Ocozías no quedó nadie capaz de retener el reino. Cuando Atalía madre de Ocozías vio que su hijo había muerto, tomó medidas para eliminar a toda la familia real de Judá. Pero Josaba, que era hija del rey y esposa del sacerdote Joyadá, raptó a Joás hijo de Ocozías cuando los príncipes estaban a punto de ser asesinados. Metiéndolo en un dormitorio con su nodriza, logró esconderlo de Atalía, de modo que no lo mataron. Hizo esto porque era la hermana de Ocozías. Seis años estuvo Joás escondido con ellos en el templo de Dios, mientras Atalía reinaba en el país.