2 PEDRO 1:10-14
2 PEDRO 1:10-14 Reina Valera 2020 (RV2020)
Por tanto, hermanos, procurad mucho más (por buenas obras) fortalecer vuestra vocación y elección, pues al hacerlo, jamás caeréis. De esta manera os será otorgada amplia entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Por esto, yo no dejaré de recordaros siempre estas cosas, aunque vosotros las sepáis y estéis afirmados en la verdad que habéis recibido. Mientras yo esté en este mundo, considero que es mi obligación llamaros la atención con mis consejos. Sé que en breve debo abandonar el cuerpo, como nuestro Señor Jesucristo me lo ha hecho saber.
2 PEDRO 1:10-14 La Palabra (versión española) (BLP)
Por tanto, hermanos, redoblad vuestro empeño en consolidar vuestro llamamiento y vuestra elección. Haciéndolo así, jamás fracasaréis. Es más, se os facilitará una puerta espaciosa para entrar en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Por eso tengo el propósito de insistir siempre en estas cosas, por más que ya las sepáis y os mantengáis firmes en la verdad que poseéis. Mientras viva en este mundo, creo que estoy en el deber de mantener despierta vuestra atención con mis consejos. Sé que muy pronto, según me lo ha dado a conocer nuestro Señor Jesucristo, habré de abandonar este cuerpo mortal.
2 PEDRO 1:10-14 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Por tanto, hermanos, ya que Dios os ha llamado y escogido, procurad que esto arraigue en vosotros, pues haciéndolo así nunca caeréis. De ese modo se os abrirán de par en par las puertas del reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Por lo cual os seguiré recordando siempre estas cosas, aun cuando ya las sabéis y permanecéis firmes en la verdad que os han enseñado. Mientras viva, creo que estoy en el deber de llamaros la atención con mis consejos. Nuestro Señor Jesucristo me ha hecho saber que pronto habré de dejar la vida presente
2 PEDRO 1:10-14 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Por lo tanto, hermanos, esforzaos más todavía para consolidar el llamamiento de Dios, que fue quien os eligió. Si hacéis estas cosas, no caeréis jamás y se os abrirán de par en par las puertas del reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Por eso siempre os recordaré estas cosas, por más que las sepáis y estéis afianzados en la verdad que ahora tenéis. Además, considero que tengo la obligación de refrescaros la memoria mientras viva en esta habitación pasajera que es mi cuerpo; porque sé que dentro de poco tendré que abandonarlo, según me lo ha manifestado nuestro Señor Jesucristo.