HECHOS 4:7-12
HECHOS 4:7-12 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Hicieron que Pedro y Juan comparecieran ante ellos y comenzaron a interrogarlos: ―¿Con qué poder, o en nombre de quién, hicisteis esto? Pedro, lleno del Espíritu Santo, les respondió: ―Gobernantes del pueblo y ancianos: Hoy se nos procesa por haber favorecido a un inválido, ¡y se nos pregunta cómo fue sanado! Sabed, pues, todos vosotros y todo el pueblo de Israel que este hombre está aquí delante de vosotros, sano gracias al nombre de Jesucristo de Nazaret, crucificado por vosotros, pero resucitado por Dios. Jesucristo es »“la piedra que desechasteis vosotros los constructores, y que ha llegado a ser la piedra angular”. De hecho, en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos».
HECHOS 4:7-12 Reina Valera 2020 (RV2020)
Pusieron en medio de ellos a Pedro y Juan, y les preguntaron: —¿Con qué potestad o en nombre de quién habéis hecho esto? Pedro, lleno del Espíritu Santo, respondió: —Gobernantes del pueblo y ancianos de Israel: Ya que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo y de la manera en que ha sido sanado, sabed, pues, todos vosotros y todo el pueblo de Israel que este hombre que se encuentra ante vosotros ha sido sanado en el nombre de Jesús el Cristo, el nazareno, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de entre los muertos. Este Jesús es la piedra rechazada por vosotros, los edificadores, y que, sin embargo, ha resultado ser la piedra angular. Y en ningún otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres en que podamos ser salvos.
HECHOS 4:7-12 La Palabra (versión española) (BLP)
Hicieron comparecer a Pedro y a Juan, y les preguntaron: —¿Con qué poder y en nombre de quién habéis hecho esto? Pedro, lleno del Espíritu Santo, les respondió: —Jefes del pueblo y ancianos: hoy ha sido curado un enfermo, y se nos pregunta quién lo ha curado. Pues bien, habéis de saber, tanto vosotros como todo el pueblo israelita, que este hombre se encuentra ahora sano ante vuestros ojos gracias a Jesús de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios ha resucitado. Él es la piedra rechazada por vosotros los constructores, pero que ha resultado ser la piedra principal. Ningún otro puede salvarnos, pues en la tierra no existe ninguna otra persona a quien Dios haya constituido autor de nuestra salvación.
HECHOS 4:7-12 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Ordenaron que les llevaran a Pedro y a Juan, y poniéndolos en medio de ellos les preguntaron: –¿Con qué autoridad o en nombre de quién hacéis estas cosas? Pedro, lleno del Espíritu Santo, les contestó: –Jefes del pueblo y ancianos: Nos preguntáis hoy acerca del bien hecho a un enfermo, para saber de qué manera ha sido sanado. Pues ante vosotros declaramos, para que lo sepa todo el pueblo de Israel, que este hombre que está aquí, delante de todos, ha sido sanado en el nombre de Jesucristo de Nazaret, el mismo a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó. Este Jesús es la piedra despreciada por vosotros los constructores, que se ha convertido en la piedra principal. En ningún otro hay salvación, porque Dios no nos ha dado a conocer el nombre de ningún otro en el mundo por el cual podamos ser salvos.