DANIEL 4:1-3
DANIEL 4:1-3 Reina Valera 2020 (RV2020)
El rey Nabucodonosor a todos los pueblos, naciones y lenguas que habitan en toda la tierra: Paz os sea multiplicada. Conviene que yo declare las señales y milagros que el Dios Altísimo ha hecho conmigo. ¡Cuán grandes son sus señales y cuán potentes sus maravillas! Su reino, reino eterno; su señorío, de generación en generación.
DANIEL 4:1-3 La Palabra (versión española) (BLP)
Mientras yo, Nabucodonosor, vivía tranquilo en mi residencia, rodeado de prosperidad en mi palacio, tuve un sueño que me preocupó; las visiones que pasaron por mi mente mientras dormía llegaron a alarmarme. Di entonces la orden de que trajeran a mi presencia a todos los sabios de Babilonia, con la intención de que me proporcionaran la interpretación del sueño.
DANIEL 4:1-3 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
“Yo, el rey Nabucodonosor, deseo paz y prosperidad a los hombres de todos los pueblos, naciones y lenguas que habitan la tierra. Quiero que todos sepan las cosas tan maravillosas que el Dios altísimo ha hecho conmigo. ¡Qué grandes son sus prodigios y milagros! Su reino durará por siempre y su poder se mantendrá de generación en generación.
DANIEL 4:1-3 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
El rey Nabucodonosor, a todos los pueblos y naciones que habitan en este mundo, y a toda lengua: ¡Paz y prosperidad para todos! Me es grato daros a conocer las señales y maravillas que el Dios Altísimo ha realizado en mi favor. ¡Cuán grandes son sus señales! ¡Cuán portentosas son sus maravillas! ¡Su reino es un reino eterno! ¡Su soberanía permanece de generación en generación!