ÉXODO 36:1-7
ÉXODO 36:1-7 La Palabra (versión española) (BLP)
Así pues, Besalel, Oholiab y aquellos a quienes el Señor había dotado de talento y habilidad especial para realizar los distintos trabajos del santuario, llevaron a cabo todo lo que había ordenado el Señor. Moisés reunió a Besalel, a Oholiab y a todos los artesanos a quienes el Señor había dotado de habilidad y estaban dispuestos a colaborar en la realización de esa tarea, y personalmente les entregó todas las ofrendas que los israelitas habían donado para la realización del santuario. Pero como día tras día el pueblo seguía llevando ofrendas voluntarias, todos los artesanos que trabajaban en el santuario suspendieron su labor para ir a decirle a Moisés: —La gente está trayendo más de lo que se necesita para acabar lo que el Señor ha ordenado. Entonces Moisés mandó pregonar por el campamento: —Que nadie, ni hombre ni mujer, contribuya más para la obra del santuario. Así el pueblo dejó de llevar más ofrendas, pues lo que ya habían aportado era más que suficiente para llevar a cabo todo el trabajo.
ÉXODO 36:1-7 Reina Valera 2020 (RV2020)
Así, pues, Bezaleel y Aholiab, y todo hombre de talento a quien el Señor haya dado sabiduría e inteligencia para saber hacer toda la obra del servicio del santuario, harán todas las cosas que ha mandado el Señor. Moisés llamó a Bezaleel, a Aholiab y a todo hombre de talento en cuyo corazón había puesto el Señor sabiduría, a todo hombre a quien su corazón le movió a venir a la obra para trabajar en ella. Ellos recibieron de Moisés todas las ofrendas que los hijos de Israel habían traído para la obra del servicio del santuario, a fin de realizarla. Y le traían ofrendas voluntarias cada mañana. Tanto, que todos los maestros que hacían la obra del santuario dejaron el trabajo que cada uno hacía, y fueron a decirle a Moisés: —El pueblo trae mucho más de lo que se necesita para la obra que el Señor ha mandado hacer. Entonces Moisés ordenó pregonar por el campamento: —Ningún hombre ni mujer haga más labores para la ofrenda del santuario. Así se le impidió al pueblo ofrecer más, pues tenían material abundante para hacer toda la obra, y aún sobraba.
ÉXODO 36:1-7 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Así pues, Besalel y Oholiab, junto con todos los que tengan aptitud artística, a quienes el Señor les haya dado sabiduría y entendimiento para hacer bien todo lo necesario para el culto del santuario, llevarán a cabo lo que el Señor ha ordenado.” Moisés llamó a Besalel y a Oholiab, y a todos los que tenían aptitudes artísticas, a quienes el Señor había dado tales aptitudes y se habían ofrecido voluntariamente para ayudar en este trabajo. Y recibieron de manos de Moisés las ofrendas que los israelitas habían traído, para comenzar a hacer lo necesario para el culto del santuario. Mientras tanto, los israelitas seguían trayendo ofrendas voluntarias día tras día. Entonces los artesanos que estaban haciendo lo necesario para el santuario, suspendieron su trabajo y fueron a decirle a Moisés: “La gente está trayendo más de lo que se necesita para el trabajo que el Señor ordenó hacer.” Moisés hizo correr por todo el campamento la voz de que ni hombres ni mujeres siguieran haciendo más labores como ofrendas para el santuario. Así se impidió que el pueblo siguiera trayendo ofrendas, pues no solo había material suficiente para llevar a cabo el trabajo, sino que sobraba.
ÉXODO 36:1-7 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
»Así pues, Bezalel y Aholiab llevarán a cabo los trabajos para el servicio del santuario, tal y como el SEÑOR lo ha ordenado, junto con todos los que tengan ese mismo espíritu artístico, y a quienes el SEÑOR haya dado pericia y habilidad para realizar toda la obra del servicio del santuario». Moisés llamó a Bezalel y a Aholiab, y a todos los que tenían el mismo espíritu artístico, y a quienes el SEÑOR había dado pericia y habilidad y se sentían movidos a venir y hacer el trabajo, y les entregó todas las ofrendas que los israelitas habían llevado para realizar la obra del servicio del santuario. Pero, como día tras día el pueblo seguía llevando ofrendas voluntarias, todos los artesanos y expertos que estaban ocupados en la obra del santuario suspendieron su trabajo para ir a decirle a Moisés: «La gente está trayendo más de lo que se necesita para llevar a cabo la obra que el SEÑOR mandó hacer». Entonces Moisés ordenó que corriera la voz por todo el campamento: «¡Que nadie, ni hombre ni mujer, haga más labores ni traiga más ofrendas para el santuario!» De ese modo, los israelitas dejaron de llevar más ofrendas, pues lo que ya habían hecho era más que suficiente para llevar a cabo toda la obra.