ÉXODO 39:1-43
ÉXODO 39:1-43 Reina Valera 2020 (RV2020)
De azul, púrpura y carmesí hicieron las vestiduras del ministerio para el servicio en el santuario, y asimismo hicieron las vestiduras sagradas para Aarón, como el Señor lo había mandado a Moisés. El efod también lo hizo de oro, de azul, púrpura, carmesí y lino torcido. Forjaron láminas de oro y las cortaron en hilos para tejerlos entre el azul, la púrpura, el carmesí y el lino, con labor primorosa. Le hicieron las hombreras que se unían en sus dos extremos. El cinto que sujetaba el efod formaba una sola pieza con él y era de lo mismo, de igual labor: era de oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido, como el Señor lo había mandado a Moisés. Labraron las piedras de ónice montadas en engastes de oro, con grabaduras de sello, que llevaban los nombres de los hijos de Israel; las puso sobre las hombreras del efod, como piedras memoriales para los hijos de Israel, según el Señor lo había mandado a Moisés. Hizo también el pectoral de obra primorosa, como la obra del efod, de oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido. Era cuadrado y doble, y medía veintidós centímetros de largo y veintidós centímetros de ancho, cuando se le doblaba. Engastaron en él cuatro hileras de piedras. En la primera un sardio, un topacio y un carbunclo; esta era la primera hilera. En la segunda, una esmeralda, un zafiro y un diamante. En la tercera, un jacinto, una ágata y una amatista. En la cuarta, un berilo, un ónice y un jaspe. Todas ellas estaban montadas y encajadas en engastes de oro. Las piedras eran doce, conforme a los nombres de los hijos de Israel. En cada piedra grabaron, a la manera en que se hace en un sello, el nombre de una de las doce tribus. Hicieron también sobre el pectoral los cordones en forma de trenza, de oro puro. Hicieron asimismo dos engastes y dos argollas de oro y pusieron dos argollas de oro en los dos extremos del pectoral, y fijaron los dos cordones de oro en aquellas dos argollas a los extremos del pectoral. Fijaron también los otros dos extremos de los dos cordones de oro en los dos engastes que pusieron sobre las hombreras del efod por delante. E hicieron otras dos argollas de oro que pusieron en los dos extremos del pectoral, en su borde, frente a la parte baja del efod. Hicieron además dos argollas de oro que pusieron en la parte delantera de las dos hombreras del efod, hacia abajo, cerca de la costura, sobre el cinto del efod. Y ataron el pectoral por sus argollas a las argollas del efod con un cordón de azul, para que estuviera sobre el cinto del mismo efod y no se separara el pectoral del efod, tal como el Señor lo había mandado a Moisés. Hizo también el manto del efod todo tejido de azul, con una abertura en el centro, como el cuello de un coselete, con un borde alrededor de la abertura, para que no se rompiera. E hicieron en las orillas del manto granadas de azul, púrpura, carmesí y lino torcido. Hicieron también campanillas de oro puro, y pusieron campanillas entre las granadas en todas las orillas del manto, que alternaban entre las granadas; una campanilla y una granada, otra campanilla y otra granada en las orillas del manto, que se usaba para ministrar, como el Señor lo había mandado a Moisés. Igualmente hicieron las túnicas, tejidas de lino fino, para Aarón y sus hijos; la mitra de lino fino, los adornos de las tiaras de lino fino y los calzones de lino, de lino torcido; también el cinto de lino torcido, de azul, púrpura y carmesí, de obra de recamador, como el Señor lo había mandado a Moisés. Hicieron asimismo la lámina de la diadema santa de oro puro, y escribieron en ella como grabado de sello: «SANTIDAD AL SEÑOR». Y pusieron en ella un cordón de azul, para colocarla sobre la mitra, por arriba, como el Señor lo había mandado a Moisés. Así fue acabada toda la obra del tabernáculo de reunión; e hicieron los hijos de Israel como el Señor había mandado a Moisés; así lo hicieron. Y trajeron el tabernáculo a Moisés, es decir, el tabernáculo y todos sus utensilios; sus corchetes, sus tablas, sus barras, sus columnas, sus basas; la cubierta de pieles de carnero teñidas de rojo, la cubierta de pieles finas, el velo del frente; el arca del testimonio y sus varas, el propiciatorio; la mesa, todos sus vasos, el pan de la proposición; el candelabro de oro puro, sus lámparas, las lámparas que debían mantenerse en orden y todos sus utensilios, el aceite para el alumbrado; el altar de oro, el aceite de la unción, el incienso aromático, la cortina para la entrada del tabernáculo; el altar de bronce con su enrejado de bronce, sus varas y todos sus utensilios, la fuente y su base; las cortinas del atrio, sus columnas y sus basas, la cortina para la entrada del atrio, sus cuerdas y sus estacas, y todos los utensilios del servicio del tabernáculo de reunión; las vestiduras del servicio para ministrar en el santuario, las sagradas vestiduras para Aarón, el sacerdote, y las vestiduras de sus hijos, para ministrar en el sacerdocio. Conforme a todas las cosas que el Señor había mandado a Moisés, así hicieron los hijos de Israel toda la obra. Cuando Moisés vio toda la obra, y que la habían hecho como el Señor había mandado, los bendijo.
ÉXODO 39:1-43 La Palabra (versión española) (BLP)
Las vestiduras de ceremonia para oficiar en el santuario y las vestiduras sagradas de Aarón, se hicieron de púrpura violeta, escarlata y carmesí, como el Señor había ordenado a Moisés. El efod lo hicieron de oro, púrpura violeta, escarlata y carmesí, y de lino fino trenzado. Forjaron a martillo unas placas de oro, las cortaron en hebras para entretejerlas hábilmente con la púrpura violeta, escarlata y carmesí, y con el lino fino trenzado. Le pusieron dos tirantes de manera que el efod quedara unido por sus dos extremos. El fajín para ajustar el efod formaba una sola pieza con él y estaba confeccionado de la misma forma: era de oro, púrpura violeta, escarlata y carmesí, y de lino fino trenzado. Sobre las piedras de ónice engastadas en oro, grabaron los nombres de las tribus israelitas como se graban los sellos. Y pusieron las piedras sobre los tirantes del efod para recordar a los israelitas, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. El pectoral del dictamen lo hicieron también manos expertas y se confeccionó con los mismos materiales que el efod: oro, púrpura violeta, escarlata y carmesí, y lino fino trenzado. Era cuadrado, de paño doble y medía veintidós centímetros por cada lado. Le engastaron una guarnición de piedras dispuestas en cuatro hileras: en la primera fila colocaron un rubí, un topacio y una esmeralda; en la segunda, una turquesa, un zafiro y un diamante; en la tercera, un jacinto, una ágata y una amatista; y en la cuarta, un crisólito, un ónice y un jaspe. Todas ellas iban engastadas en oro y hacían un total de doce piedras, como el número de las tribus israelitas. En cada piedra grabaron, a la manera en que se hace en un sello, el nombre de una de las doce tribus. También hicieron para el pectoral unas cadenas de oro puro, trenzadas como cordones, dos engastes de oro y dos argollas de oro que sujetaron en sus dos extremos. Pasaron los dos extremos de los dos cordones de oro por las dos argollas superiores del pectoral, y los otros dos extremos de los cordones los engancharon en los dos engarces que fijaron en la parte delantera de los tirantes del efod. Hicieron, asimismo, dos argollas de oro y las sujetaron en los dos extremos inferiores del pectoral, sobre el borde inferior, el que queda junto al efod. Además hicieron otras dos argollas de oro, que fijaron en la parte inferior y delantera de los dos tirantes del efod, junto a la costura y encima del fajín del efod. Así sujetaron el pectoral, haciendo pasar entre sus argollas y las argollas del efod un cordón de púrpura violeta, de manera que el pectoral quedaba fijo sobre el fajín y no podía desprenderse del efod. Tejieron el manto del efod todo de púrpura violeta. En el centro tenía una abertura como el cuello de un coselete; alrededor de la abertura la tela tenía un dobladillo para que no se rasgase. Adornaron el borde inferior del manto con granadas de púrpura violeta, escarlata y carmesí y lino fino trenzado. Hicieron además unos cascabeles de oro puro y los colocaron en el borde inferior del manto, alternando con las granadas: un cascabel de oro y una granada; otro cascabel de oro y otra granada; así todo el borde inferior del manto. El manto se usaba para oficiar, como el Señor se lo había ordenado a Moisés. Después hicieron las túnicas de lino fino para Aarón y sus hijos; hicieron el turbante de lino fino, la tiara con adornos de lino fino y los calzones, también de lino fino; igualmente hicieron la faja de lino fino trenzado, recamada artísticamente, de púrpura violeta, escarlata y carmesí, conforme al mandato del Señor a Moisés. Por último, hicieron una placa de oro puro con las palabras: «Consagrado al Señor», grabadas como se graban los sellos. Luego le pusieron un cordón de púrpura violeta para colocar la placa sobre la parte delantera del turbante, conforme al mandato del Señor a Moisés. Así llegó a su fin la construcción de la Morada, la Tienda del encuentro. Los israelitas lo hicieron todo conforme al mandato del Señor a Moisés. Entonces presentaron a Moisés la Morada, su Tienda y lo que la recubre, sus ganchos, sus tablones, sus varales, sus columnas y sus basas; la cubierta de pieles de carnero curtidas, la sobrecubierta de pieles de marsopa y el velo de separación; el Arca del testimonio, sus varales y su cubierta; la mesa con todos sus utensilios y los panes de la ofrenda; el candelabro de oro puro con sus accesorios, las lámparas que deben colocarse en él y el aceite para el alumbrado; el altar de oro, el aceite de la unción, el incienso aromático y la cortina para la entrada de la Tienda; el altar de bronce con su enrejado igualmente de bronce, sus varales y todos sus utensilios; la pila con su base; las cortinas del atrio con sus columnas y bases, la cortina que hace las veces de puerta del atrio, sus cuerdas y sus tableros, y todos los utensilios para el servicio de la Morada, la Tienda del encuentro; las vestiduras de ceremonia para oficiar en el santuario: las vestiduras sagradas del sacerdote Aarón y las vestiduras que usarían sus hijos cuando oficiaran como sacerdotes. Los israelitas lo hicieron todo conforme al mandato del Señor a Moisés. Cuando Moisés revisó todo el trabajo y comprobó que lo habían hecho conforme a lo que había mandado el Señor, los bendijo.
ÉXODO 39:1-43 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
La ropa tejida para el servicio en el santuario se hizo de tela morada, tela de púrpura y tela roja. También se hizo así la ropa especial para Aarón, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. Para hacer el efod se usó oro, tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido. Se forjaron a martillo unas placas de oro, las cuales se cortaron en hilos para entretejerlos, a manera de bordado, en la tela morada, en la tela de púrpura, en la tela roja y en el lino. Se le pusieron al efod dos tirantes unidos a sus dos extremos. El cinturón que iba sobre el efod, para sujetarlo, estaba hecho de la misma manera: de oro, tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. Las piedras de cornalina se colocaron sobre monturas de oro, con los nombres de los hijos de Israel grabados en ellas como un sello. Luego Besalel las puso sobre los tirantes del efod, para recordar a los hijos de Israel, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. El pectoral estaba hecho también con un fino bordado como el del efod: de oro, tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido. Era doble y cuadrado, y de veintidós centímetros por cada lado. Estaba cubierto con cuatro hileras de piedras preciosas: la primera hilera tenía un rubí, un crisólito y una esmeralda; la segunda, un granate, un zafiro y un jade; la tercera, un jacinto, un ágata y una amatista; y la cuarta, un topacio, una cornalina y un jaspe. Las piedras estaban montadas en monturas de oro, y eran doce, por los doce nombres de los hijos de Israel; cada una de ellas tenía grabado en forma de sello el nombre de una de las doce tribus. Sobre el pectoral hicieron unas cadenas de oro puro, torcidas como cordones. También hicieron dos monturas de oro y dos argollas de oro; pusieron las argollas de oro en los dos extremos superiores del pectoral, y las cadenas de oro sobre las dos argollas. Las puntas de las dos cadenas las pusieron sobre las dos monturas y las aseguraron sobre los tirantes del efod por su parte delantera. Hicieron otras dos argollas de oro y las pusieron en los dos extremos inferiores del pectoral, sobre la orilla interior que quedaba junto al efod. E hicieron dos argollas más, también de oro, y las pusieron en la parte delantera de los tirantes del efod, pero por debajo, junto a las costuras y un poco por encima del cinturón del efod. Luego unieron las argollas del pectoral a las argollas del efod con un cordón morado, para que el pectoral quedara por encima del cinturón del efod y no se separara del mismo, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. Toda la capa del efod se hizo de un tejido de tela morada. La orilla de la abertura del centro tenía un dobladillo como el de los chalecos de cuero, para que no se rompiera. Adornaron el borde de la capa con granadas de tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido. Hicieron también campanitas de oro puro y las combinaron con las granadas, poniéndolas entre ellas alrededor de todo el borde de la capa para oficiar: una campanita y una granada, otra campanita y otra granada, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. Las túnicas de lino para Aarón y sus hijos fueron hechas por un tejedor, lo mismo que el turbante, los tocados y los calzones de lino torcido. El cinturón de lino torcido, tela morada, tela de púrpura y tela roja, fue bordado artísticamente, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. También hicieron la placa de oro puro que le consagraba como sacerdote, y en ella grabaron, a manera de sello, “Consagrado al Señor”. Luego le pusieron un cordón morado para colocar la placa sobre el turbante por la parte superior, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. La construcción del santuario, la tienda del encuentro con Dios, llegó a su fin. Los israelitas hicieron todo exactamente como el Señor se lo había ordenado a Moisés, y entregaron a Moisés el santuario, o sea la tienda del encuentro, y todos sus utensilios: sus ganchos, tablas, travesaños, postes y bases, la cubierta de pieles de carnero teñidas de rojo, la cubierta de pieles finas, el velo para cubrir el arca, el arca del pacto y sus varas, la tapa, la mesa y todos sus utensilios, el pan consagrado al Señor, el candelabro de oro puro y sus lámparas –o sea, las lámparas que debían tenerse ordenadas–, y todos sus utensilios; el aceite para el alumbrado, el altar de oro, el aceite de consagrar, el incienso aromático, la cortina para la entrada de la tienda del encuentro, el altar de bronce con su rejilla de bronce, sus varas y todos sus utensilios, la palangana y su base, las cortinas del atrio, sus postes y sus bases, la cortina para la entrada del atrio, las cuerdas y estacas del atrio, todos los utensilios para el servicio del santuario, o sea la tienda del encuentro, la ropa tejida para oficiar en el santuario, la ropa especial del sacerdote Aarón y la ropa sacerdotal de sus hijos. Los israelitas hicieron todo tal y como el Señor se lo había ordenado a Moisés, y cuando Moisés vio que lo habían hecho así, les dio su bendición.
ÉXODO 39:1-43 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Las vestiduras tejidas para ministrar en el santuario se hicieron de lana teñida de púrpura, carmesí y escarlata. También se hicieron vestiduras sagradas para Aarón, como se lo mandó el SEÑOR a Moisés. El efod lo hizo Bezalel de oro, lana teñida de púrpura, carmesí y escarlata, y lino fino. Martillaron finas láminas de oro y las cortaron en hebras para entretejerlas artísticamente con la lana teñida de púrpura, carmesí y escarlata, y con el lino. Se hicieron hombreras para el efod, las cuales se sujetaron a sus dos extremos. Su cinturón tenía la misma hechura que el efod, y formaba una sola pieza con él; estaba hecho de oro, lana teñida de púrpura, carmesí y escarlata, y lino fino, como se lo mandó el SEÑOR a Moisés. Las piedras de ónice se engarzaron en los engastes de filigrana de oro, y en ellas se grabaron, a manera de sello, los nombres de los hijos de Israel. Luego las sujetaron a las hombreras del efod para recordar a los hijos de Israel, como se lo mandó el SEÑOR a Moisés. Bezalel hizo también el pectoral, bordado artísticamente, como el efod, con hilo de oro, lana teñida de púrpura, carmesí y escarlata, y lino fino, doble y cuadrado, de veinte centímetros por lado. En él se engastaron cuatro filas de piedras preciosas. En la primera fila había un rubí, un crisólito y una esmeralda; en la segunda hilera, una turquesa, un zafiro y un jade; en la tercera hilera, un jacinto, un ágata y una amatista; en la cuarta hilera, un topacio, un ónice y un jaspe. Estaban engarzadas en engastes de filigrana de oro, y eran doce piedras, una por cada uno de los hijos de Israel, grabada a manera de sello con el nombre de cada una de las doce tribus. Para el pectoral se hicieron cadenillas de oro puro, a manera de cordón. Se hicieron dos engastes en filigrana de oro y dos anillos de oro, y se sujetaron los anillos en los dos extremos del pectoral; luego se sujetaron las dos cadenillas de oro en los anillos a los extremos del pectoral, y los otros dos extremos de las cadenillas en los dos engastes, asegurándolos a las hombreras del efod por la parte delantera. Se hicieron otros dos anillos de oro, y los sujetaron a los otros dos extremos del pectoral, en el borde interior, junto al efod. Además, se hicieron otros dos anillos de oro, los cuales sujetaron la parte inferior de las hombreras, por delante del efod y junto a la costura, exactamente encima del cinturón del efod. Con un cordón de lana púrpura, ataron los anillos del pectoral a los anillos del efod, a fin de unir el pectoral al cinturón para que no se desprendiera del efod, como se lo mandó el SEÑOR a Moisés. Bezalel hizo de lana teñida de púrpura, y tejido artísticamente, todo el manto del efod. Lo hizo con una abertura en el centro, como abertura para la cabeza, y con un refuerzo alrededor de la abertura, para que no se rasgara. En todo el borde inferior del manto se hicieron granadas de lana púrpura, carmesí y escarlata, y de lino fino, lo mismo que campanillas de oro puro, las cuales se colocaron en todo el borde inferior, entre las granadas. Las campanillas y las granadas se colocaron, en forma alternada, en todo el borde inferior del manto que debía llevarse para ejercer el ministerio, como se lo mandó el SEÑOR a Moisés. Para Aarón y sus hijos se hicieron túnicas de lino tejidas artísticamente, las mitras y el turbante de lino, y la ropa interior de lino fino. La faja era de lino fino y de lana teñida de púrpura, carmesí y escarlata, recamada artísticamente, como se lo mandó el SEÑOR a Moisés. La placa sagrada se hizo de oro puro, y se grabó en ella, a manera de sello, SANTIDAD. Luego se le ató un cordón de lana teñida de púrpura para sujetarla al turbante, como se lo mandó el SEÑOR a Moisés. Toda la obra del santuario, es decir, la Tienda de reunión, quedó terminada. Los israelitas lo hicieron todo tal y como el SEÑOR se lo mandó a Moisés, y le presentaron a Moisés el santuario, la tienda y todos sus utensilios, sus ganchos, tablones, travesaños, postes y bases, el toldo de pieles de carnero teñidas de rojo, el toldo de pieles de delfín y la cortina que resguardaba el arca, el arca del pacto con sus varas y el propiciatorio, la mesa con todos sus utensilios y el pan de la Presencia, el candelabro de oro puro con su hilera de lámparas y todos sus utensilios, y el aceite para el alumbrado; el altar de oro, el aceite de la unción, el incienso aromático y la cortina para la entrada de la tienda, el altar de bronce con su enrejado de bronce, sus varas y todos sus utensilios; el lavamanos y su pedestal, las cortinas del atrio con sus postes y bases, y la cortina para la entrada del atrio; las cuerdas y las estacas del toldo para el atrio; todos los utensilios para el santuario, la Tienda de reunión, y las vestiduras tejidas para ministrar en el santuario, tanto las vestiduras sagradas para el sacerdote Aarón como las vestiduras sacerdotales para sus hijos. Los israelitas hicieron toda la obra tal y como el SEÑOR se lo había ordenado a Moisés. Moisés, por su parte, inspeccionó la obra y, al ver que la habían hecho tal y como el SEÑOR se lo había ordenado, los bendijo.