ESDRAS 9:5-6
ESDRAS 9:5-6 Reina Valera 2020 (RV2020)
Entonces, salí de mi aflicción y, rasgados mi vestidura y mi manto, me postré de rodillas, extendí mis manos al Señor, mi Dios, y dije: —Dios mío, confuso y avergonzado estoy para levantar, oh Dios mío, mi rostro hacia ti, porque nuestras iniquidades se han multiplicado sobre nuestras cabezas, y nuestros delitos han crecido hasta el cielo.
ESDRAS 9:5-6 La Palabra (versión española) (BLP)
A esa hora superé mi aflicción y, con mi túnica y mi manto rasgados, doblé mis rodillas y extendí mis manos al Señor, mi Dios suplicando: —Dios mío, estoy avergonzado y confuso y no me atrevo a levantar mi rostro hacia ti, pues nuestros pecados se han multiplicado y nuestras culpas se amontonan hasta llegar al cielo.
ESDRAS 9:5-6 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
A esa hora me recuperé de mi abatimiento y, todavía con la ropa rasgada, comencé a orar al Señor mi Dios, diciendo: “Dios mío, Dios mío, me siento tan avergonzado y confundido que no sé cómo dirigirme a ti. Nuestras faltas han sobrepasado el límite y nuestras culpas llegan hasta el cielo.
ESDRAS 9:5-6 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
A la hora del sacrificio me recobré de mi abatimiento y, con la túnica y el manto rasgados, caí de rodillas, extendí mis manos hacia el SEÑOR mi Dios, y le dije en oración: «Dios mío, estoy confundido y siento vergüenza de levantar el rostro hacia ti, porque nuestras maldades se han amontonado hasta cubrirnos por completo; nuestra culpa ha llegado hasta el cielo.