GÉNESIS 3:9-13
GÉNESIS 3:9-13 La Palabra (versión española) (BLP)
Pero Dios, el Señor, llamó al hombre diciendo: —¿Dónde estás? El hombre contestó: —Te oí en el jardín, tuve miedo porque estaba desnudo, y me escondí. Entonces Dios, el Señor, le preguntó: —¿Y quién te dijo que estabas desnudo? ¿Acaso has comido del árbol del que te prohibí comer? El hombre respondió: —La mujer que me diste por compañera me ofreció de ese fruto y yo lo probé. Entonces Dios, el Señor, preguntó a la mujer: —¿Por qué hiciste eso? Ella respondió: —La serpiente me engañó y comí.
GÉNESIS 3:9-13 Reina Valera 2020 (RV2020)
Pero Dios el Señor llamó al hombre, y le preguntó: —¿Dónde estás? Él respondió: —He oído tu voz en el huerto y he tenido miedo, porque estaba desnudo, y por eso me he escondido. Entonces Dios le preguntó: —¿Quién te ha enseñado que estabas desnudo? ¿Acaso has comido del árbol del cual yo te había mandado que no comieras? El hombre le respondió: —La mujer que me diste por compañera me ha dado del árbol, y yo he comido. Entonces Dios el Señor dijo a la mujer: —¿Qué es lo que has hecho? Y la mujer respondió: —La serpiente me ha engañado, y por eso he comido.
GÉNESIS 3:9-13 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Pero Dios el Señor llamó al hombre y le preguntó: –¿Dónde estás? El hombre contestó: –Oí que andabas por el jardín, y tuve miedo porque estoy desnudo. Por eso me escondí. Entonces Dios le preguntó: –¿Y quién te ha dicho que estás desnudo? ¿Acaso has comido del fruto del árbol del que te dije que no comieras? El hombre contestó: –La mujer que me diste por compañera me dio de ese fruto, y yo lo comí. Entonces Dios el Señor preguntó a la mujer: –¿Por qué lo hiciste? Ella respondió: –La serpiente me engañó, y por eso comí del fruto.
GÉNESIS 3:9-13 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Pero Dios el SEÑOR llamó al hombre y le dijo: ―¿Dónde estás? El hombre contestó: ―Escuché que andabas por el jardín, y tuve miedo porque estoy desnudo. Por eso me escondí. ―¿Y quién te ha dicho que estás desnudo? —le preguntó Dios—. ¿Acaso has comido del fruto del árbol que yo te prohibí comer? Él respondió: ―La mujer que me diste por compañera me dio de ese fruto, y yo lo comí. Entonces Dios el SEÑOR le preguntó a la mujer: ―¿Qué es lo que has hecho? ―La serpiente me engañó, y comí —contestó ella.