GÉNESIS 45:25-28
GÉNESIS 45:25-28 Reina Valera 2020 (RV2020)
Subieron, pues, de Egipto, y llegaron a la tierra de Canaán, junto a su padre Jacob y le comunicaron la noticia: «¡José aún vive!, y es señor en toda la tierra de Egipto». Pero el corazón de Jacob se afligió, porque no les creía. Entonces ellos le repitieron todas las palabras que José les había hablado; y al ver Jacob los carros que José enviaba para llevarlo, su espíritu revivió. Y dijo Israel: —¡Con esto me basta! ¡José, mi hijo, vive todavía! Iré y lo veré antes de morir.
GÉNESIS 45:25-28 La Palabra (versión española) (BLP)
Ellos salieron de Egipto y llegaron a la tierra de Canaán, donde se encontraba su padre Jacob, y le comunicaron la noticia: —José vive y es gobernador de todo Egipto. Pero Jacob ni se inmutó, porque no les creía. Solo cuando ellos le repitieron palabra por palabra lo que les dijo José y vio los carros que José enviaba para llevarlo [a Egipto], recobró la ilusión. Israel entonces exclamó: —¡Esto me basta! José, mi hijo, vive todavía. Iré y lo veré antes de morir.
GÉNESIS 45:25-28 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Salieron de Egipto y llegaron a Canaán, donde vivía su padre Jacob. Cuando contaron a Jacob que José vivía todavía, y que él era quien gobernaba en todo Egipto, no supo qué hacer ni qué decir, pues no podía creer lo que le estaban diciendo. Pero cuando le contaron todo lo que José les había dicho, y cuando vio las carretas que José había mandado para llevarlo, se entusiasmó en gran manera. Entonces dijo: “¡Me basta saber que mi hijo José vive todavía! Iré a verle antes de morir.”
GÉNESIS 45:25-28 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Los hermanos de José salieron de Egipto y llegaron a Canaán, donde residía su padre Jacob. Al llegar le dijeron: «¡José vive, José vive! ¡Es el gobernador de todo Egipto!» Jacob quedó atónito y no les creía, pero ellos le repetían una y otra vez todo lo que José les había dicho. Y, cuando su padre Jacob vio los carros que José había enviado para llevarlo, se reanimó. Entonces exclamó: «¡Con esto me basta! ¡Mi hijo José aún vive! Iré a verlo antes de morirme».