ISAÍAS 66:9-14
ISAÍAS 66:9-14 La Palabra (versión española) (BLP)
Si soy yo quien abre la matriz, ¿no seré quien haga dar a luz? —dice el Señor—. Y si soy quien hago dar a luz, ¿voy acaso a cerrarle el paso? —dice tu Dios—. ¡Festejad a Jerusalén, alegraos por ella, todos los que la amáis; gozad con su gozo los que os dolíais por ella! Para mamar hasta hartaros del consuelo de sus pechos; para apurar con delicia sus ubres bien repletas. Pues así dice el Señor: Voy a dirigir hacia ella la paz, igual que un río; como un torrente crecido, la riqueza de los pueblos. Mamaréis mecidos en los brazos, acariciados sobre las rodillas; como a un niño consolado por su madre, así pienso yo consolaros. Al verlo, se alegrará vuestro corazón, florecerán vuestros huesos como prado.
ISAÍAS 66:9-14 Reina Valera 2020 (RV2020)
Yo, que hago dar a luz, ¿no haré nacer?, dice el Señor. «Yo, que hago engendrar, ¿impediré el nacimiento?», dice tu Dios. «Alegraos con Jerusalén, gozaos con ella todos los que la amáis; llenaos de gozo con ella todos los que os enlutáis por ella, para que seáis amamantados hasta saciaros del consuelo de sus pechos, para que bebáis y os deleitéis con la plenitud de su gloria». Porque así dice el Señor: Yo extiendo sobre ella la paz como un río y las riquezas de las naciones como un torrente que se desborda; y seréis amamantados, seréis llevados en sus brazos y sobre las rodillas seréis mimados. Como aquel a quien consuela su madre, así os consolaré yo a vosotros, y en Jerusalén recibiréis consuelo. Lo veréis y se alegrará vuestro corazón, y vuestros huesos reverdecerán como la hierba. La mano del Señor para con sus siervos se dará a conocer y se enojará contra sus enemigos.
ISAÍAS 66:9-14 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
¿Cómo iba yo a impedir el nacimiento, si soy yo quien hace dar a luz?” El Señor tu Dios lo ha dicho. “Alegraos con Jerusalén, llenaos de gozo con ella todos los que la amáis; uníos a su alegría todos los que habéis llorado por ella; y ella, como una madre, os alimentará de sus consuelos hasta que estéis satisfechos. Porque yo, el Señor, digo: Yo haré que la paz venga sobre ella como un río, y las riquezas de las naciones como un torrente desbordado. Ella os alimentará, os llevará en sus brazos y os acariciará sobre sus rodillas. Como una madre consuela a su hijo, así os consolaré yo, y encontraréis el consuelo en Jerusalén.” Cuando veáis esto, vuestro corazón se alegrará; vuestro cuerpo se renovará como la hierba. El Señor dará a conocer su poder entre sus siervos y su ira entre sus enemigos.
ISAÍAS 66:9-14 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
¿Podría yo abrir la matriz, y no provocar el parto? —dice el SEÑOR—. ¿O cerraría yo el seno materno, siendo yo el que hago dar a luz? —dice tu Dios—. Mas alegraos con Jerusalén, y regocijaos por ella, todos los que la amáis; saltad con ella de alegría, todos los que por ella os condoléis. Porque seréis amamantados y saciados, y hallaréis consuelo en sus pechos; beberéis hasta saciaros, y os deleitaréis en sus henchidos senos». Porque así dice el SEÑOR: «Hacia ella extenderé la paz como un torrente, y la riqueza de las naciones como río desbordado. Vosotros seréis amamantados, llevados en sus brazos, mecidos en sus rodillas. Como madre que consuela a su hijo, así yo os consolaré a vosotros; en Jerusalén seréis consolados». Cuando veáis esto, se regocijará vuestro corazón, y vuestro cuerpo florecerá como la hierba; el SEÑOR dará a conocer su poder entre sus siervos, y su furor entre sus enemigos.