JUECES 3:14-20
JUECES 3:14-20 Reina Valera 2020 (RV2020)
Los hijos de Israel sirvieron dieciocho años a Eglón, rey de los moabitas. Entonces los hijos de Israel clamaron al Señor, y el Señor les levantó un libertador: Aod hijo de Gera, benjaminita, el cual era zurdo. Un día, los hijos de Israel enviaron con él un presente a Eglón, rey de Moab. Aod se había hecho un puñal de dos filos, de casi medio metro de largo, y lo llevaba ajustado al muslo derecho debajo de la ropa. Y fue Aod y entregó el presente a Eglón, rey de Moab, quien era un hombre muy grueso. Después de entregar el presente, Aod despidió a los mensajeros que lo habían llevado. Pero al llegar al lugar donde están los ídolos de Gilgal, Aod regresó y dijo a Eglón: —¡Oh Rey!, tengo una palabra secreta para ti. Entonces dijo el rey: —Calla. Y salieron de delante de él todos los que allí estaban. Aod se acercó al rey, que estaba sentado solo en una sala de verano, y le dijo: —Tengo palabra de Dios para ti. Eglón se levantó de la silla.
JUECES 3:14-20 La Palabra (versión española) (BLP)
Los israelitas estuvieron sometidos a Eglón, rey de Moab, dieciocho años. Entonces los israelitas suplicaron al Señor y el Señor les concedió un libertador: Ejud, hijo de Guerá, benjaminita, que era zurdo. Los israelitas le encomendaron la entrega del tributo a Eglón, rey de Moab. Ejud se hizo un puñal de dos filos, de casi medio metro de largo, y se lo ciñó debajo de la ropa sobre el muslo derecho. Presentó el tributo a Eglón, rey de Moab, que era extremadamente gordo. En cuanto terminó de presentar el tributo, Ejud mandó marchar a la gente que le había acompañado a llevar el tributo. Él, por su parte, se volvió desde el lugar llamado Los Ídolos, en la región de Guilgal, y dijo: —Tengo un mensaje secreto para ti, ¡oh rey! El rey ordenó: —¡Que nos dejen solos! Y salieron de su presencia todos los que estaban con él. Ejud se le acercó. El rey estaba sentado tomando el fresco en su galería particular. Ejud le dijo: —Tengo una palabra de Dios para ti. El rey se levantó de su silla
JUECES 3:14-20 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Durante dieciocho años, los israelitas tuvieron que servir a Eglón, hasta que suplicaron al Señor y él hizo que surgiera alguien para salvarlos. Ese salvador fue un zurdo llamado Ehud, hijo de Guerá, de la tribu de Benjamín. Un día, los israelitas enviaron el tributo a Eglón por medio de Ehud. Pero Ehud se hizo una espada de dos filos, como de medio metro de largo, y se la puso al cinto por debajo de la ropa y al lado derecho; luego se fue a llevar el tributo a Eglón, que era muy gordo. Después de entregarle a Eglón el tributo, Ehud salió con los que habían venido con él, pero al llegar a los ídolos que están cerca de Guilgal, Ehud regresó a donde estaba Eglón y le dijo: –Tengo un mensaje para Su Majestad, pero debo dárselo en privado. El rey ordenó entonces a los que estaban a su servicio que guardaran silencio y salieran de su presencia. En cuanto Ehud se quedó a solas con Eglón, que estaba sentado en la sala de verano, se acercó a él y le dijo: –El mensaje que traigo a Su Majestad es de parte de Dios. Al oir esto, Eglón se levantó de su trono
JUECES 3:14-20 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Los israelitas estuvieron sometidos a Eglón, rey de Moab, durante dieciocho años. Los israelitas volvieron a clamar al SEÑOR, y el SEÑOR les levantó un libertador: Aod, el hijo de Guerá, de la tribu de Benjamín, quien era zurdo. Por medio de él los israelitas enviaron tributo a Eglón, rey de Moab. Aod se había hecho un puñal de doble filo como de treinta centímetros de largo, el cual sujetó a su muslo derecho por debajo de la ropa. Le presentó el tributo a Eglón, rey de Moab, que era muy grueso. Cuando Aod terminó de presentárselo, se fue a despedir a los hombres que habían transportado el tributo. Pero luego regresó desde las canteras que estaban cerca de Guilgal, y dijo: ―Oh rey, tengo un mensaje secreto para ti. ―¡Silencio! —ordenó el rey. Y todos sus servidores se retiraron de su presencia. Entonces Aod se acercó al rey, que estaba sentado solo en la habitación del piso superior de su palacio de verano, y le dijo: ―Tengo un mensaje de Dios para ti. Cuando el rey se levantó de su trono