MATEO 28:2-5
MATEO 28:2-5 Reina Valera 2020 (RV2020)
De pronto hubo un gran terremoto, porque un ángel del Señor descendió del cielo, se acercó, removió la piedra y se sentó sobre ella. Su aspecto era como un relámpago y su vestido blanco como la nieve. Los guardas temblaron de miedo y se quedaron como muertos. Pero el ángel dijo a las mujeres: —No temáis vosotras. Yo sé que buscáis a Jesús, el que fue crucificado.
MATEO 28:2-5 La Palabra (versión española) (BLP)
De pronto se produjo un fuerte terremoto, pues un ángel del Señor, que había bajado del cielo, se acercó al sepulcro, removió la piedra que cerraba la entrada y se sentó sobre ella. Resplandecía como un relámpago y sus vestiduras eran blancas como la nieve. Los soldados que guardaban el sepulcro se echaron a temblar de miedo y se quedaron como muertos. Entonces el ángel dijo a las mujeres: —No temáis. Ya sé que estáis buscando a Jesús, el que fue crucificado.
MATEO 28:2-5 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
De pronto hubo un fuerte temblor de tierra, porque un ángel del Señor bajó del cielo y, acercándose al sepulcro, quitó la piedra que lo cerraba y se sentó sobre ella. El ángel brillaba como un relámpago y su ropa era blanca como la nieve. Al verle, los soldados temblaron de miedo y se quedaron como muertos. El ángel dijo a las mujeres: –No os asustéis. Sé que estáis buscando a Jesús, el crucificado
MATEO 28:2-5 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Sucedió que hubo un terremoto violento, porque un ángel del Señor bajó del cielo y, acercándose al sepulcro, quitó la piedra y se sentó sobre ella. Su aspecto era como el de un relámpago, y su ropa era blanca como la nieve. Los guardias tuvieron tanto miedo de él que se pusieron a temblar y quedaron como muertos. El ángel dijo a las mujeres: ―No tengáis miedo; sé que buscáis a Jesús, el que fue crucificado.