MATEO 5:23-30
MATEO 5:23-30 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
»Por lo tanto, si estás presentando tu ofrenda en el altar y allí recuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí delante del altar. Ve primero y reconcíliate con tu hermano; luego vuelve y presenta tu ofrenda. »Si tu adversario te va a denunciar, llega a un acuerdo con él lo más pronto posible. Hazlo mientras estéis de camino al juzgado, no sea que te entregue al juez, y el juez al guardia, y te echen en la cárcel. Te aseguro que no saldrás de allí hasta que pagues el último céntimo. »Habéis oído que se dijo: “No cometas adulterio”. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer y la codicia ya ha cometido adulterio con ella en el corazón. Por tanto, si tu ojo derecho te hace pecan, sácatelo y tíralo. Más te vale perder una sola parte de tu cuerpo, y no que todo él sea arrojado al infierno. Y, si tu mano derecha te hace pecar, córtatela y arrójala. Más te vale perder una sola parte de tu cuerpo, y no que todo él vaya al infierno.
MATEO 5:23-30 Reina Valera 2020 (RV2020)
Por tanto, si traes tu ofrenda al altar y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí mismo, delante del altar, ve a reconciliarte con tu hermano, y después vuelve al altar y, entonces sí, presenta tu ofrenda. Ponte de acuerdo pronto con tu adversario, en tanto que estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez y el juez al guardia, y seas echado en la cárcel. Te aseguro que no saldrás de allí hasta que pagues el último céntimo. Habéis oído que se dijo: No cometerás adulterio . Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla ya ha cometido adulterio con ella en su corazón. Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo y deshazte de él, pues mejor te es perder uno de tus miembros que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno. Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala y deshazte de ella, pues mejor te es perder uno de tus miembros que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno.
MATEO 5:23-30 La Palabra (versión española) (BLP)
Por tanto, si en el momento de ir a presentar tu ofrenda en el altar, te acuerdas de que tu hermano tiene algo en contra de ti, deja tu ofrenda allí mismo delante del altar y ve primero a reconciliarte con tu hermano. Luego regresa y presenta tu ofrenda. Ponte de acuerdo con tu adversario sin demora mientras estás a tiempo de hacerlo, no sea que tu adversario te entregue al juez, y el juez a los guardias, y vayas a dar con tus huesos en la cárcel. Te aseguro que no saldrás de allí hasta que pagues el último céntimo de tu deuda. Sabéis que se dijo: No cometas adulterio. Pero yo os digo: El que mira con malos deseos a la mujer de otro, ya está adulterando con ella en el fondo de su corazón. Así que, si tu ojo derecho es para ti ocasión de pecado, sácatelo y arrójalo lejos de ti. Más te vale perder una parte del cuerpo que ser arrojado entero a la gehena. Y si tu mano derecha es para ti ocasión de pecado, córtatela y arrójala lejos de ti. Más te vale perder una parte del cuerpo que ser arrojado entero a la gehena.
MATEO 5:23-30 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
“Así que, si al llevar tu ofrenda al altar te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí mismo delante del altar y ve primero a ponerte en paz con tu hermano. Entonces podrás volver al altar y presentar tu ofrenda. “Si alguien quiere llevarte a juicio, procura ponerte de acuerdo con él mientras aún estés a tiempo, para que no te entregue al juez; porque si no, el juez te entregará a los guardias y te meterán en la cárcel. Te aseguro que no saldrás de allí hasta que pagues el último céntimo. “Habéis oído que antes se dijo: ‘No cometas adulterio.’ Pero yo os digo que cualquiera que mira con codicia a una mujer ya cometió adulterio con ella en su corazón. “Por tanto, si tu ojo derecho te hace caer en pecado, sácalo y échalo lejos de ti; mejor es que pierdas una sola parte del cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno. Y si tu mano derecha te hace caer en pecado, córtala y échala lejos de ti; mejor es que pierdas una sola parte del cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno.