MATEO 9:10-17
MATEO 9:10-17 Reina Valera 2020 (RV2020)
Y aconteció que estando él sentado a la mesa en la casa de Mateo llegaron muchos recaudadores de impuestos y pecadores y se sentaron juntamente con Jesús y sus discípulos. Cuando vieron esto los fariseos, dijeron a los discípulos: —¿Por qué come vuestro Maestro con los recaudadores de impuestos y pecadores? Al oír esto Jesús, les dijo: —Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero y no sacrificio , porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento. Entonces se le acercaron los discípulos de Juan y le preguntaron: —¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos muchas veces y tus discípulos no ayunan? Jesús les dijo: —¿Acaso pueden los que están de boda tener luto en tanto que el esposo está con ellos? Vendrán días cuando el esposo les será quitado. Entonces ayunarán. Nadie pone remiendo de paño nuevo en vestido viejo, porque tal remiendo tira del vestido y se hace peor la rotura. Ni echan vino nuevo en odres viejos; de otra manera los odres se rompen, el vino se derrama y los odres se pierden. El vino nuevo se echa en odres nuevos y lo uno y lo otro se conservan juntamente.
MATEO 9:10-17 La Palabra (versión española) (BLP)
Más tarde, estando Jesús sentado a la mesa en casa de Mateo, acudieron muchos recaudadores de impuestos y gente de mala reputación, que se sentaron también a la mesa con Jesús y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: —¿Cómo es que vuestro Maestro se sienta a comer con esa clase de gente? Jesús lo oyó y les dijo: —No necesitan médico los que están sanos, sino los que están enfermos. A ver si aprendéis lo que significa aquello de: Yo no quiero que me ofrezcáis sacrificios, sino que seáis compasivos. Yo no he venido a llamar a los buenos, sino a los pecadores. Entonces se acercaron a Jesús los discípulos de Juan el Bautista y le preguntaron: —¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos tantas veces y, en cambio, tus discípulos no ayunan? Jesús les contestó: —¿Pueden acaso estar tristes los invitados a una boda mientras el novio está con ellos? Ya llegará el momento en que les faltará el novio; entonces ayunarán. Nadie remienda un vestido viejo con una pieza de tela nueva, porque el remiendo tira de la tela, y el roto se hace mayor. Tampoco se echa vino nuevo en odres viejos, porque los odres se revientan, se derrama el vino y se pierden los odres. El vino nuevo hay que echarlo en odres nuevos, para que ambas cosas se conserven.
MATEO 9:10-17 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Sucedió que Jesús estaba comiendo en la casa, y muchos cobradores de impuestos, y otra gente de mala fama, llegaron y se sentaron también a la mesa con Jesús y sus discípulos. Al ver esto, los fariseos preguntaron a los discípulos: –¿Cómo es que vuestro maestro come con los cobradores de impuestos y los pecadores? Jesús los oyó y les dijo: –Los que gozan de buena salud no necesitan médico, sino los enfermos. Id y aprended qué significan estas palabras de la Escritura: ‘Quiero que seáis compasivos, y no que me ofrezcáis sacrificios.’ Pues yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores. Los seguidores de Juan el Bautista se acercaron a Jesús y le preguntaron: –Nosotros y los fariseos ayunamos con frecuencia: ¿Por qué tus discípulos no ayunan? Jesús les contestó: –¿Acaso pueden estar tristes los invitados a una boda mientras el novio está con ellos? Pero llegará el momento en que se lleven al novio, y entonces ayunarán. “Nadie remienda un vestido viejo con un trozo de tela nueva, porque lo nuevo encoge y tira del vestido viejo, y el desgarrón se hace mayor. Tampoco se echa vino nuevo en odres viejos, porque los odres revientan, y tanto el vino como los odres se pierden. Por eso hay que echar el vino nuevo en odres nuevos, para que se conserven ambas cosas.”
MATEO 9:10-17 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Mientras Jesús estaba comiendo en casa de Mateo, muchos recaudadores de impuestos y pecadores llegaron y comieron con él y sus discípulos. Cuando los fariseos vieron esto, preguntaron a sus discípulos: ―¿Por qué come vuestro maestro con recaudadores de impuestos y con pecadores? Al oír esto, Jesús les contestó: ―No son los sanos los que necesitan médico, sino los enfermos. Pero id y aprended qué significa esto: “Lo que quiero es misericordia y no sacrificios”. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores. Un día se le acercaron los discípulos de Juan y le preguntaron: ―¿Cómo es que nosotros y los fariseos ayunamos, pero no así tus discípulos? Jesús les contestó: ―¿Acaso pueden estar de luto los invitados del novio mientras él está con ellos? Llegará el día en que se les quitará el novio; entonces sí ayunarán. Nadie remienda un vestido viejo con un retazo de tela nueva, porque el remiendo fruncirá el vestido y la rotura se hará peor. Ni tampoco se echa vino nuevo en odres viejos. De hacerlo así, se reventarán los odres, se derramará el vino y los odres se echarán a perder. Más bien, el vino nuevo se echa en odres nuevos, y así ambos se conservan.