SALMOS 42:3-5
SALMOS 42:3-5 La Palabra (versión española) (BLP)
Mi llanto es mi alimento día y noche mientras no dejan de preguntarme: «¿Dónde está tu Dios?». Siento gran tristeza al recordar cómo avanzaba yo entre el gentío, llevándolos a la casa de Dios entre vítores de gozo y alabanza en medio de una muchedumbre en fiesta. ¿Por qué estoy abatido? ¿Por qué estoy tan turbado? En Dios pondré mi esperanza, no cesaré de alabarlo. ¡Él es mi Dios salvador!
SALMOS 42:3-5 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Mis lágrimas son mi pan de día y de noche, mientras me echan en cara a todas horas: «¿Dónde está tu Dios?» Recuerdo esto y me deshago en llanto: yo solía ir con la multitud, y la conducía a la casa de Dios. Entre voces de alegría y acciones de gracias hacíamos gran celebración. ¿Por qué voy a inquietarme? ¿Por qué me voy a angustiar? En Dios pondré mi esperanza y todavía lo alabaré. ¡Él es mi Salvador y mi Dios!
SALMOS 42:3-5 Reina Valera 2020 (RV2020)
Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, mientras me dicen todos los días: «¿Dónde está tu Dios?». Me acuerdo de estas cosas y desahogo mi alma conmigo, de cómo yo iba con la multitud y la conducía hasta la casa de Dios, entre voces de alegría y de alabanza del pueblo en fiesta. ¿Por qué te abates, alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarle, ¡salvación mía y Dios mío!