SALMOS 73:1-8
SALMOS 73:1-8 La Palabra (versión española) (BLP)
En verdad es bondadoso Dios con Israel, con los que tienen limpio el corazón. Pero mis pasos casi se tuercen, mis pies por poco resbalan, pues envidié a los soberbios al ver la dicha de los malos. No se angustian por su muerte, todo su cuerpo está sano; ignoran las fatigas humanas, no sufren su azote como los demás. Por eso, el orgullo ciñe su cuello, un manto de violencia los cubre. La maldad surge de sus entrañas, la ambición desborda su corazón. Se burlan y hablan con malicia, se expresan con arrogante tiranía.
SALMOS 73:1-8 Reina Valera 2020 (RV2020)
Ciertamente, es bueno Dios para con Israel, para con los limpios de corazón. En cuanto a mí, casi se deslizaron mis pies, ¡por poco resbalaron mis pasos!, porque tuve envidia de los arrogantes, al ver la prosperidad de los impíos. No se atribulan por su muerte, pues su vigor está entero. No pasan trabajos como los otros mortales, ni son azotados como los demás hombres. Por tanto, la soberbia los corona; se cubren con vestido de violencia. Los ojos se les saltan de gordura; logran con creces los antojos del corazón. Se mofan y hablan con maldad de hacer violencia; hablan con altanería.
SALMOS 73:1-8 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
En verdad, ¡cuán bueno es Dios con Israel, con los puros de corazón! Yo estuve a punto de caer, y poco me faltó para que resbalara. Sentí envidia de los arrogantes, al ver la prosperidad de esos malvados. Ellos no tienen ningún problema; su cuerpo está fuerte y saludable. Libres están de los afanes de todos; no les afectan los infortunios humanos. Por eso lucen su orgullo como un collar, y hacen gala de su violencia. ¡Están que revientan de malicia, y hasta se les ven sus malas intenciones! Son burlones, hablan con doblez y, arrogantes, oprimen y amenazan.