Luego de contarle la historia, Jesús preguntó al experto de la ley:
– A ver, dime, de los tres hombres que pasaron por el camino, ¿cuál fue el prójimo del que fue asaltado y estaba casi muerto?
Él contestó:
– El que tuvo misericordia de él y lo ayudó.
Entonces Jesús le dijo:
– Ve y haz tú lo mismo.