De pronto el SEÑOR llamó: —¡Samuel! —Sí —respondió Samuel—. ¿Qué quiere? Se levantó y corrió hasta donde estaba Elí. —Aquí estoy. ¿Me llamó usted? —Yo no te llamé —dijo Elí—. Vuelve a la cama. Entonces, Samuel se volvió a acostar. Luego, el SEÑOR volvió a llamar: —¡Samuel! Nuevamente Samuel se levantó y fue a donde estaba Elí. —Aquí estoy. ¿Me llamó usted? —Yo no te llamé, hijo mío —respondió Elí—. Vuelve a la cama. Samuel todavía no conocía al SEÑOR, porque nunca antes había recibido un mensaje de él. Así que el SEÑOR llamó por tercera vez, y una vez más Samuel se levantó y fue a donde estaba Elí. —Aquí estoy. ¿Me llamó usted? En ese momento Elí se dio cuenta de que era el SEÑOR quien llamaba al niño. Entonces le dijo a Samuel: —Ve y acuéstate de nuevo y, si alguien vuelve a llamarte, di: “Habla, SEÑOR, que tu siervo escucha”. Así que Samuel volvió a su cama. Y el SEÑOR vino y llamó igual que antes: —¡Samuel! ¡Samuel! Y Samuel respondió: —Habla, que tu siervo escucha.
Leer 1 Samuel 3
Escuchar 1 Samuel 3
Compartir
Comparar todas las versiones: 1 Samuel 3:4-10
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos