Éxodo 2:5-10
Éxodo 2:5-10 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
En eso, la hija del faraón bajó a bañarse en el Nilo. Sus doncellas, mientras tanto, se paseaban por la orilla del río. De pronto, la hija del faraón vio la cesta entre los juncos y ordenó a una de sus esclavas que fuera por ella. Cuando la hija del faraón abrió la cesta y vio allí dentro un niño que lloraba, le tuvo compasión y exclamó: —¡Es un niño hebreo! La hermana del niño preguntó entonces a la hija del faraón: —¿Quiere usted que vaya y llame a una nodriza hebrea, para que críe al niño por usted? —Ve a llamarla —contestó. La muchacha fue y trajo a la madre del niño, y la hija del faraón le dijo: —Llévate a este niño y críamelo. Yo te pagaré por hacerlo. Fue así como la madre del niño se lo llevó y lo crio. Ya crecido el niño, se lo llevó a la hija del faraón y ella lo adoptó como hijo suyo; además, le puso por nombre Moisés, pues dijo: «¡Yo lo saqué del río!».
Éxodo 2:5-10 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Más tarde, la hija del rey de Egipto bajó a bañarse al río. Mientras caminaba por la orilla con sus sirvientas, vio la canasta en medio de los juncos y mandó a una de sus sirvientas que fuera a traerla. Cuando abrió la canasta, y vio al niño llorando, le dio lástima. Sorprendida gritó: «¡Es un niño israelita!» En ese momento la hermana del niño salió y le dijo a la princesa: —¿Quiere Su Majestad que llame a una mujer israelita para que alimente y cuide al niño? Y ella contestó: —Anda, ve a llamarla. La hermana fue y llamó a su mamá. Cuando la madre llegó, la princesa le dijo: —Llévate a este niño a tu casa. Aliméntalo y cuídalo por mí, y yo te lo pagaré. La madre se llevó al niño y lo cuidó. Cuando el niño creció, se lo llevó a la princesa. Entonces ella lo adoptó como su propio hijo y le puso por nombre «Moisés», que quiere decir «Yo lo saqué del agua».
Éxodo 2:5-10 Reina Valera Contemporánea (RVC)
La hija del faraón bajó al río para bañarse y, mientras sus doncellas se paseaban por la ribera del río, vio el cesto en el carrizal. Entonces envió a una criada suya para que lo recogiera. Cuando ella abrió el cesto, vio allí a un niño que lloraba, y le tuvo compasión. Entonces dijo: «Este niño es de los hebreos.» La hermana del niño dijo entonces a la hija del faraón: «¿Debo ir y llamar a una nodriza hebrea, para que críe este niño por ti?» Y la hija del faraón respondió: «Sí, ve.» Entonces la joven fue y llamó a la madre del niño, y la hija del faraón le dijo: «Llévate a este niño y críalo por mí. Yo te pagaré por hacerlo.» La mujer tomó entonces al niño y lo crio, y cuando el niño creció ella lo llevó a la hija del faraón, quien lo adoptó como su hijo y le puso por nombre Moisés, pues dijo: «Yo lo rescaté de las aguas.»
Éxodo 2:5-10 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Más tarde, la hija del faraón bajó a bañarse al río y, mientras sus sirvientas se paseaban por la orilla, vio el canastillo entre los juncos. Entonces mandó a una de sus esclavas que se lo trajera. Al abrir el canastillo y ver que allí dentro había un niño llorando, la hija del faraón sintió compasión de él y dijo: —Este es un niño hebreo. Entonces la hermana del niño propuso a la hija del faraón: —¿Le parece a usted bien que llame a una nodriza hebrea, para que le dé el pecho a este niño? —Ve por ella —contestó la hija del faraón. Entonces la muchacha fue por la madre del niño, y la hija del faraón le dijo: —Toma a este niño y críamelo, y yo te pagaré por tu trabajo. La madre del niño se lo llevó y lo crió, y ya grande se lo entregó a la hija del faraón, la cual lo adoptó como hijo suyo y lo llamó Moisés, pues dijo: —Yo lo saqué del agua.
Éxodo 2:5-10 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Y la hija de Faraón descendió a lavarse al río, y paseándose sus doncellas por la ribera del río, vio ella la arquilla en el carrizal, y envió una criada suya a que la tomase. Y cuando la abrió, vio al niño; y he aquí que el niño lloraba. Y teniendo compasión de él, dijo: De los niños de los hebreos es este. Entonces su hermana dijo a la hija de Faraón: ¿Iré a llamarte una nodriza de las hebreas, para que te críe este niño? Y la hija de Faraón respondió: Ve. Entonces fue la doncella, y llamó a la madre del niño, a la cual dijo la hija de Faraón: Lleva a este niño y críamelo, y yo te lo pagaré. Y la mujer tomó al niño y lo crio. Y cuando el niño creció, ella lo trajo a la hija de Faraón, la cual lo prohijó, y le puso por nombre Moisés, diciendo: Porque de las aguas lo saqué.
Éxodo 2:5-10 La Biblia de las Américas (LBLA)
Y la hija de Faraón bajó a bañarse al Nilo, y mientras sus doncellas se paseaban por la ribera del río, vio la cestilla entre los juncos y mandó a una criada suya para que la trajera. Al abrirla, vio al niño, y he aquí, el niño lloraba. Y le tuvo compasión, y dijo: Este es uno de los niños de los hebreos. Entonces la hermana del niño dijo a la hija de Faraón: ¿Quieres que vaya y te llame una nodriza de las hebreas para que te críe al niño? Y la hija de Faraón le respondió: Sí, ve. Y la muchacha fue y llamó a la madre del niño. Y la hija de Faraón le dijo: Llévate a este niño y críamelo, y yo te daré tu salario. Y la mujer tomó al niño y lo crió. Cuando el niño creció, ella lo llevó a la hija de Faraón, y vino a ser hijo suyo; y le puso por nombre Moisés, diciendo: Pues lo he sacado de las aguas.
Éxodo 2:5-10 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Al poco tiempo, la hija del faraón bajó a bañarse en el río, y sus sirvientas se paseaban por la orilla. Cuando la princesa vio la canasta entre los juncos, mandó a su criada que se la trajera. Al abrir la canasta la princesa vio al bebé. El niño lloraba, y ella sintió lástima por él. «Seguramente es un niño hebreo», dijo. Entonces la hermana del bebé se acercó a la princesa. —¿Quiere que vaya a buscar a una mujer hebrea para que le amamante al bebé? —le preguntó. —¡Sí, consigue a una! —contestó la princesa. Entonces la muchacha fue y llamó a la madre del bebé. «Toma a este niño y dale el pecho por mí —le dijo la princesa a la madre del niño—. Te pagaré por tu ayuda». Así que la mujer se fue con el bebé a su casa y lo amamantó. Años más tarde, cuando el niño creció, ella se lo devolvió a la hija del faraón, quien lo adoptó como su propio hijo y lo llamó Moisés, pues explicó: «Lo saqué del agua».