Hebreos 12:12-14
Hebreos 12:12-14 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Por tanto, renueven las fuerzas de sus manos débiles y de sus rodillas temblorosas. «Hagan sendas derechas para sus pies» para que la pierna coja no se disloque, sino que se sane. Busquen la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Hebreos 12:12-14 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Por todo eso, no debemos dejar de confiar totalmente en Dios. Si la vida es como una carrera, y ustedes tienen ya cansadas las manos y débiles las rodillas, cobren nuevas fuerzas. Corran por un camino recto y parejo, para que el pie que esté cojo se sane y no se tuerza más. Traten de vivir en paz con todos, y de obedecer a Dios; porque si no lo hacen, jamás lo verán cara a cara.
Hebreos 12:12-14 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Levanten, pues, las manos caídas y las rodillas entumecidas; enderecen las sendas por donde van, para que no se desvíen los cojos, sino que sean sanados. Procuren vivir en paz con todos, y en santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Hebreos 12:12-14 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Así pues, renueven las fuerzas de sus manos cansadas y de sus rodillas debilitadas, y busquen el camino derecho, para que sane el pie que está cojo y no se tuerza más. Procuren estar en paz con todos y llevar una vida santa; pues sin la santidad, nadie podrá ver al Señor.
Hebreos 12:12-14 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado. Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Hebreos 12:12-14 La Biblia de las Américas (LBLA)
Por tanto, fortaleced las manos débiles y las rodillas que flaquean, y haced sendas derechas para vuestros pies, para que la pierna coja no se descoyunte, sino que se sane. Buscad la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Hebreos 12:12-14 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Por lo tanto, renueven las fuerzas de sus manos cansadas y fortalezcan sus rodillas debilitadas. Tracen un camino recto para sus pies, a fin de que los débiles y los cojos no caigan, sino que se fortalezcan. Esfuércense por vivir en paz con todos y procuren llevar una vida santa, porque los que no son santos no verán al Señor.