Jeremías 14:20-21
Jeremías 14:19-21 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Jeremías respondió: «Dios de Israel, nos has herido tanto que ya no podremos recuperarnos. Has rechazado por completo a Judá, y ya no quieres a Jerusalén. Esperábamos pasarla bien, y la estamos pasando mal. Esperábamos vivir en paz, pero vivimos llenos de miedo. Reconocemos nuestra maldad, y los pecados de nuestros padres; ¡hemos pecado contra ti! Demuestra que eres fiel, y no nos rechaces. ¡Cumple el trato que hiciste con nosotros, y no destruyas la bella ciudad donde has puesto tu trono!
Jeremías 14:20-21 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Reconocemos, Señor, nuestra maldad y la culpa de nuestros antepasados; hemos pecado contra ti. ¡Por el honor de tu nombre, no nos rechaces; no trates con desprecio a la ciudad donde está tu glorioso trono! ¡Recuerda la alianza que hiciste con nosotros, no faltes a ella!
Jeremías 14:20-21 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Reconocemos, SEÑOR, nuestra maldad y la iniquidad de nuestros antepasados. ¡Hemos pecado contra ti! En honor a tu nombre, no nos desprecies; no deshonres tu trono glorioso. ¡Acuérdate de tu pacto con nosotros! ¡No lo quebrantes!
Jeremías 14:20-21 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Reconocemos, Señor, nuestra impiedad y la iniquidad de nuestros padres, pues contra ti hemos pecado. ¡Pero no nos deseches! ¡No deshonres tu trono glorioso! ¡Haz honor a tu nombre! ¡Acuérdate de tu pacto con nosotros! ¡No lo invalides!
Jeremías 14:20-21 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Reconocemos, oh Jehová, nuestra impiedad, la iniquidad de nuestros padres; porque contra ti hemos pecado. Por amor de tu nombre no nos deseches, ni deshonres tu glorioso trono; acuérdate, no invalides tu pacto con nosotros.
Jeremías 14:20-21 La Biblia de las Américas (LBLA)
Reconocemos, oh SEÑOR, nuestra impiedad, la iniquidad de nuestros padres, pues hemos pecado contra ti. No nos desprecies, por amor a tu nombre, no deshonres el trono de tu gloria; acuérdate, no anules tu pacto con nosotros.
Jeremías 14:20-21 Nueva Traducción Viviente (NTV)
SEÑOR, confesamos nuestra maldad y también la de nuestros antepasados; todos hemos pecado contra ti. Por el honor de tu fama, SEÑOR, no nos abandones; no deshonres tu propio trono glorioso. Por favor, recuérdanos, y no rompas tu pacto con nosotros.