S. Mateo 9:32-34
S. Mateo 9:32-34 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Mientras ellos salían, le llevaron un mudo endemoniado. Así que Jesús expulsó al demonio y el que había estado mudo habló. La gente quedó asombrada y decía: «Jamás se ha visto nada igual en Israel». Pero los fariseos decían: «Este expulsa a los demonios por medio del príncipe de los demonios».
S. Mateo 9:32-34 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Después de que aquellos hombres salieron de la casa, unas personas le trajeron a Jesús un hombre que no podía hablar porque tenía un demonio. Cuando Jesús expulsó al demonio, el hombre pudo hablar. La gente que estaba allí se quedó asombrada, y decía: «¡Nunca se había visto algo así en Israel!» Pero los fariseos decían: «Si Jesús expulsa a los demonios, es porque el jefe mismo de todos los demonios le da ese poder.»
S. Mateo 9:32-34 Reina Valera Contemporánea (RVC)
En el momento en que salían, le trajeron a Jesús un mudo que estaba endemoniado. En cuanto el demonio fue expulsado, el mudo comenzó a hablar. Y la gente se asombraba y decía: «¡Nunca se ha visto nada igual en Israel!» Pero los fariseos decían: «Este expulsa a los demonios por el poder del príncipe de los demonios.»
S. Mateo 9:32-34 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Mientras los ciegos salían, algunas personas trajeron a Jesús un mudo que estaba endemoniado. En cuanto Jesús expulsó al demonio, el mudo comenzó a hablar. La gente, admirada, decía: —¡Nunca se ha visto en Israel una cosa igual! Pero los fariseos decían: —Es el propio jefe de los demonios quien le ha dado a este el poder de expulsarlos.
S. Mateo 9:32-34 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Mientras salían ellos, he aquí, le trajeron un mudo, endemoniado. Y echado fuera el demonio, el mudo habló; y la gente se maravillaba, y decía: Nunca se ha visto cosa semejante en Israel. Pero los fariseos decían: Por el príncipe de los demonios echa fuera los demonios.
S. Mateo 9:32-34 La Biblia de las Américas (LBLA)
Y al salir ellos de allí, he aquí, le trajeron un mudo endemoniado. Y después que el demonio había sido expulsado, el mudo habló; y las multitudes se maravillaban, y decían: Jamás se ha visto cosa igual en Israel. Pero los fariseos decían: El echa fuera los demonios por el príncipe de los demonios.
S. Mateo 9:32-34 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Cuando se fueron, un hombre que no podía hablar, poseído por un demonio, fue llevado a Jesús. Entonces Jesús expulsó al demonio y después el hombre comenzó a hablar. Las multitudes quedaron asombradas. «¡Jamás sucedió algo así en Israel!», exclamaron. Sin embargo, los fariseos dijeron: «Puede expulsar demonios porque el príncipe de los demonios le da poder».