Números 9:15-23
Números 9:15-23 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
El día en que se armó el santuario, es decir, la tienda donde se guardan las tablas del pacto, la nube lo cubrió y durante toda la noche cobró apariencia de fuego hasta el amanecer. Así sucedía siempre: de día la nube cubría el santuario, mientras que de noche cobraba apariencia de fuego. Cada vez que la nube se levantaba y se apartaba de la tienda, los israelitas se ponían en marcha; y donde la nube se detenía, allí acampaban. Dependiendo de lo que el SEÑOR indicara, los israelitas se ponían en marcha o acampaban; y todo el tiempo que la nube reposaba sobre el santuario, se quedaban allí. No importaba que se quedara muchos días sobre el santuario; los israelitas cumplían la orden del SEÑOR y no abandonaban el lugar. Lo mismo ocurría cuando la nube reposaba poco tiempo sobre el santuario: cuando el SEÑOR así lo indicaba, los israelitas acampaban o se ponían en marcha. A veces, la nube permanecía solo desde la tarde hasta la mañana y, cuando se levantaba por la mañana, partían. Ya sea de día o de noche, siempre que se levantaba la nube, se ponían en marcha. Aunque la nube reposara sobre el santuario un par de días, un mes o más tiempo, los israelitas se quedaban en el campamento y no partían. Pero cuando se levantaba, se ponían en marcha. Cuando el SEÑOR así lo indicaba, los israelitas acampaban o se ponían en marcha. Así cumplían la orden del SEÑOR, según lo que el SEÑOR había dicho por medio de Moisés.
Números 9:15-23 Reina Valera Contemporánea (RVC)
El día que el tabernáculo fue erigido, la nube se posó sobre la tienda del testimonio y cubrió el tabernáculo, y desde la tarde y hasta la mañana siguiente la nube sobre el tabernáculo parecía ser de fuego. Esto era siempre así: De día, la nube cubría el tabernáculo, y de noche lo cubría esa apariencia de fuego. Cuando la nube se levantaba del tabernáculo, los hijos de Israel se ponían en marcha; cuando la nube se detenía en algún lugar, los hijos de Israel acampaban. A una orden del Señor, los hijos de Israel se ponían en marcha; a otra orden del Señor, acampaban; y mientras la nube permanecía sobre el tabernáculo, ellos permanecían acampados. Si la nube se detenía sobre el tabernáculo mucho tiempo, los hijos de Israel respetaban la orden del Señor y no partían; pero si la nube permanecía poco tiempo sobre el tabernáculo, a una orden del Señor acampaban, y a una orden del Señor partían. Algunas veces la nube se detenía desde la tarde hasta el día siguiente, otras veces la nube se levantaba por la mañana. Cuando se detenía un solo día, o cuando se levantaba por la noche, se ponían en marcha. Podían pasar dos días, un mes, o un año, si la nube permanecía sobre el tabernáculo, los hijos de Israel seguían acampados y no se movían; pero si la nube se levantaba, ellos se ponían en marcha. A una orden del Señor acampaban, y a una orden del Señor se ponían en marcha, siempre siguiendo las órdenes del Señor, tal y como él lo había ordenado por medio de Moisés.
Números 9:15-23 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
El día que se armó el santuario del pacto, vino una nube y lo cubrió. Cuando cayó la noche, apareció sobre el santuario un fuego, pero al amanecer desapareció. Y así sucedía siempre: durante el día lo cubría una nube, pero en la noche lo iluminaba una especie de fuego. Dios les indicaba a los israelitas cuándo debían ponerse en marcha y cuándo debían acampar. Lo hacía de la siguiente manera: cuando la nube se elevaba y empezaba a moverse, los israelitas se levantaban y la seguían; cuando se detenía, también se detenían los israelitas. Plantaban su campamento y se quedaban allí todo el tiempo que la nube permanecía sobre el santuario. A veces la nube se detenía solo una noche; a veces unos días, a veces un mes, y en ocasiones hasta un año. Cuando la nube se detenía mucho tiempo, los israelitas obedecían y no se movían de allí. No importaba si era de día o de noche, cuando la nube se movía, los israelitas la seguían; cuando se detenía, el pueblo también se detenía y se ocupaba del culto a Dios. Así era como Dios les daba órdenes a los israelitas por medio de Moisés, y ellos lo obedecían.
Números 9:15-23 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
El día en que instalaron el santuario, es decir, la tienda de la alianza, la nube lo cubrió. Y desde el atardecer aparecía sobre el santuario una especie de fuego que duraba hasta el amanecer. Así sucedía siempre: de día, la nube cubría la tienda, y de noche se veía una especie de fuego. Cuando la nube se levantaba de encima de la tienda, los israelitas se ponían en camino, y en el lugar donde la nube se detenía, allí acampaban. Cuando el Señor lo ordenaba, los israelitas se ponían en camino o acampaban, y allí se quedaban todo el tiempo que la nube permanecía sobre el santuario. Si la nube se quedaba sobre el santuario bastante tiempo, los israelitas detenían su marcha para ocuparse del servicio del Señor. Si la nube se quedaba sobre el santuario solo unos cuantos días, a una orden del Señor se ponían en camino, y a otra orden suya se detenían. A veces la nube se quedaba solo por la noche, y por la mañana se levantaba; entonces ellos se ponían en camino. Lo mismo de día que de noche, cuando la nube se levantaba, ellos se ponían en camino. Y si la nube se detenía sobre el santuario un par de días, un mes o un año, los israelitas acampaban y no seguían adelante. Pero en cuanto la nube se levantaba, ellos seguían su viaje. A una orden del Señor acampaban, y a otra orden suya se ponían en camino. Mientras tanto, se ocupaban del servicio del Señor, como él lo había ordenado por medio de Moisés.
Números 9:15-23 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
El día que el tabernáculo fue erigido, la nube cubrió el tabernáculo sobre la tienda del testimonio; y a la tarde había sobre el tabernáculo como una apariencia de fuego, hasta la mañana. Así era continuamente: la nube lo cubría de día, y de noche la apariencia de fuego. Cuando se alzaba la nube del tabernáculo, los hijos de Israel partían; y en el lugar donde la nube paraba, allí acampaban los hijos de Israel. Al mandato de Jehová los hijos de Israel partían, y al mandato de Jehová acampaban; todos los días que la nube estaba sobre el tabernáculo, permanecían acampados. Cuando la nube se detenía sobre el tabernáculo muchos días, entonces los hijos de Israel guardaban la ordenanza de Jehová, y no partían. Y cuando la nube estaba sobre el tabernáculo pocos días, al mandato de Jehová acampaban, y al mandato de Jehová partían. Y cuando la nube se detenía desde la tarde hasta la mañana, o cuando a la mañana la nube se levantaba, ellos partían; o si había estado un día, y a la noche la nube se levantaba, entonces partían. O si dos días, o un mes, o un año, mientras la nube se detenía sobre el tabernáculo permaneciendo sobre él, los hijos de Israel seguían acampados, y no se movían; mas cuando ella se alzaba, ellos partían. Al mandato de Jehová acampaban, y al mandato de Jehová partían, guardando la ordenanza de Jehová como Jehová lo había dicho por medio de Moisés.
Números 9:15-23 La Biblia de las Américas (LBLA)
Y el día que fue erigido el tabernáculo, la nube cubrió el tabernáculo, la tienda del testimonio, y al atardecer estaba sobre el tabernáculo como una apariencia de fuego, hasta la mañana. Así sucedía continuamente; la nube lo cubría de día, y la apariencia de fuego de noche. Y cuando la nube se levantaba de sobre la tienda, enseguida los hijos de Israel partían; y en el lugar donde la nube se detenía, allí acampaban los hijos de Israel. Al mandato del SEÑOR los hijos de Israel partían, y al mandato del SEÑOR acampaban; mientras la nube estaba sobre el tabernáculo, permanecían acampados. Aun cuando la nube se detenía sobre el tabernáculo por muchos días, los hijos de Israel guardaban la ordenanza del SEÑOR y no partían. Y sucedía que cuando la nube permanecía algunos días sobre el tabernáculo, según la orden del SEÑOR, permanecían acampados; y según la orden del SEÑOR, partían. Y sucedía que cuando la nube permanecía desde el atardecer hasta la mañana, cuando la nube se levantaba por la mañana, ellos partían; y si permanecía durante el día y durante la noche, cuando la nube se levantaba, ellos partían. Ya fuera que la nube se detuviera sobre el tabernáculo permaneciendo sobre él dos días, o un mes, o un año, los hijos de Israel permanecían acampados y no partían; pero cuando se levantaba, partían. Y al mandato del SEÑOR acampaban, y al mandato del SEÑOR partían; guardaban la ordenanza del SEÑOR según el mandato del SEÑOR por medio de Moisés.
Números 9:15-23 Nueva Traducción Viviente (NTV)
El día que se armó el tabernáculo, la nube lo cubrió. Pero desde la tarde hasta el amanecer la nube que cubría el tabernáculo tomaba la apariencia de una columna de fuego. De esta manera ocurría siempre: por la noche la nube que cubría el tabernáculo tomaba la apariencia de fuego. Cada vez que la nube se elevaba de la carpa sagrada, el pueblo de Israel levantaba el campamento y la seguía; donde la nube se detenía, el pueblo de Israel armaba el campamento. De esta manera los israelitas viajaban y acampaban por orden del SEÑOR, donde él les indicaba que fueran. Permanecían en el campamento todo el tiempo que la nube se quedaba encima del tabernáculo. Si la nube se quedaba por largo tiempo sobre el tabernáculo, los israelitas permanecían allí y llevaban a cabo sus deberes ante el SEÑOR. Algunas veces la nube se detenía por pocos días sobre el tabernáculo; entonces el pueblo se quedaba por pocos días, como el SEÑOR ordenaba. Luego, por orden del SEÑOR, levantaban el campamento y se ponían en marcha. Algunas veces la nube se detenía solo por la noche y se elevaba a la mañana siguiente; pero fuera de día o de noche, cuando la nube se elevaba, el pueblo levantaba el campamento y se ponía en marcha. Si la nube permanecía sobre el tabernáculo por dos días, un mes o un año, el pueblo de Israel acampaba y no se ponía en marcha; pero en cuanto se elevaba, ellos levantaban el campamento y se ponían en marcha. Así que acampaban o viajaban bajo las órdenes del SEÑOR y obedecían todo lo que el SEÑOR les decía por medio de Moisés.