Proverbios 29:9-18
Proverbios 29:9-18 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Cuando el sabio entabla pleito contra un necio, aunque se enoje o se ría, no logrará la paz. Los asesinos aborrecen a los íntegros y tratan de matar a los justos. El necio da rienda suelta a su ira, pero el sabio sabe dominarla. Cuando un gobernante se deja llevar por mentiras, todos sus oficiales se corrompen. Algo en común tienen el pobre y el opresor: a los dos el SEÑOR les ha dado la vista. El rey que juzga al pobre según la verdad afirma su trono para siempre. La vara de la disciplina imparte sabiduría, pero el joven malcriado avergüenza a su madre. Cuando aumentan los impíos, también aumenta el pecado, pero los justos presenciarán su caída. Disciplina a tu hijo, y te traerá tranquilidad; te dará muchas satisfacciones. Donde no hay visión, el pueblo se extravía; ¡dichosos los que son obedientes a la ley!
Proverbios 29:9-18 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Solo burlas y enojos saca el sabio que discute con un tonto. Los asesinos desean la muerte de la gente buena y honrada. El necio no esconde su enojo; el sabio sabe controlarse. El gobernante que presta atención a toda clase de mentiras, vivirá rodeado de ayudantes malvados. Al pobre y al que lo maltrata Dios les ha dado la vida. El rey afirma su reinado cuando gobierna bien a los pobres. Los golpes y la disciplina enseñan a ser sabio, pero el que es malcriado solo avergüenza a su madre. Donde aumentan los malvados, aumenta la maldad; ¡pero la gente buena los verá fracasar! Corrige a tu hijo y vivirás tranquilo y satisfecho. Donde no hay un buen gobernante, el pueblo no sabe qué hacer; pero Dios bendice a los que obedecen su ley.
Proverbios 29:9-18 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Cuando el sabio entra en pleito con el necio, el necio no deja de reírse ni de burlarse. Los homicidas odian al hombre cabal, pero los hombres honrados buscan su bien. El necio da rienda suelta a su enojo, pero el sabio sabe cómo calmarlo. Cuando un gobernante hace caso de mentiras, todos sus servidores se vuelven corruptos. El pobre y el usurero coinciden en algo: el Señor da luz a los ojos de ambos. El trono del rey se afirma para siempre, si este juzga a los pobres con la verdad. La vara y la corrección imparten sabiduría, pero el hijo consentido avergüenza a su madre. Si aumentan los impíos, aumenta el pecado, pero los justos los verán fracasar. Corrige a tu hijo, y vivirás tranquilo, y a ti mismo te dará grandes alegrías. Cuando no hay visión, el pueblo se desvía; ¡dichoso aquel que obedece la ley!
Proverbios 29:9-18 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
El sabio que entabla pleito contra un necio, se enoja, recibe burlas y no arregla nada. Los asesinos y desalmados odian a muerte al hombre honrado. El necio da rienda suelta a sus impulsos, pero el sabio acaba por refrenarlos. El gobernante que hace caso de mentiras corrompe a todos sus servidores. El oprimido y el opresor tienen algo en común: el Señor les ha dado la vista a ambos. El rey que gobierna a los pobres con lealtad, afirma su trono para siempre. A golpes y reprensiones se aprende, pero el hijo consentido avergüenza a su madre. Si los malvados abundan, abunda el pecado; pero los hombres honrados los verán fracasar. Corrige a tu hijo y te hará vivir tranquilo, y te dará muchas satisfacciones. Donde no hay dirección divina, no hay orden; ¡feliz el pueblo que cumple la ley de Dios!
Proverbios 29:9-18 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Si el hombre sabio contendiere con el necio, Que se enoje o que se ría, no tendrá reposo. Los hombres sanguinarios aborrecen al perfecto, Mas los rectos buscan su contentamiento. El necio da rienda suelta a toda su ira, Mas el sabio al fin la sosiega. Si un gobernante atiende la palabra mentirosa, Todos sus servidores serán impíos. El pobre y el usurero se encuentran; Jehová alumbra los ojos de ambos. Del rey que juzga con verdad a los pobres, El trono será firme para siempre. La vara y la corrección dan sabiduría; Mas el muchacho consentido avergonzará a su madre. Cuando los impíos son muchos, mucha es la transgresión; Mas los justos verán la ruina de ellos. Corrige a tu hijo, y te dará descanso, Y dará alegría a tu alma. Sin profecía el pueblo se desenfrena; Mas el que guarda la ley es bienaventurado.
Proverbios 29:9-18 La Biblia de las Américas (LBLA)
Cuando un sabio tiene controversia con un necio, este se enoja o se ríe, y no hay sosiego. Los hombres sanguinarios odian al intachable, pero los rectos se preocupan por su alma. El necio da rienda suelta a su ira, pero el sabio la reprime. Si un gobernante presta atención a palabras mentirosas, todos sus servidores se vuelven impíos. El pobre y el opresor tienen esto en común: el SEÑOR da la luz a los ojos de ambos. El rey que juzga con verdad a los pobres afianzará su trono para siempre. La vara y la reprensión dan sabiduría, pero el niño consentido avergüenza a su madre. Cuando aumentan los impíos, aumenta la transgresión, pero los justos verán su caída. Corrige a tu hijo y te dará descanso, y dará alegría a tu alma. Donde no hay visión, el pueblo se desenfrena, pero bienaventurado es el que guarda la ley.
Proverbios 29:9-18 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Si un sabio lleva a un necio a juicio, habrá alboroto y burlas pero no se solucionará nada. Los sanguinarios odian a las personas intachables, pero los honrados procuran ayudarlas. Los necios dan rienda suelta a su enojo, pero los sabios calladamente lo controlan. Si un gobernante presta atención a los mentirosos, todos sus consejeros serán perversos. El pobre y el opresor tienen esto en común: el SEÑOR les da la vista a ambos. Si un rey juzga al pobre con justicia, su trono perdurará para siempre. Disciplinar a un niño produce sabiduría, pero un hijo sin disciplina avergüenza a su madre. Cuando los perversos están en autoridad, el pecado abunda, pero los justos vivirán para verlos caer. Disciplina a tus hijos, y te darán tranquilidad de espíritu y alegrarán tu corazón. Cuando la gente no acepta la dirección divina, se desenfrena. Pero el que obedece la ley es alegre.