Proverbios 31:26-29
Proverbios 31:26-29 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Cuando habla, lo hace con sabiduría; cuando instruye, lo hace con amor. Está atenta a la marcha de su hogar y el pan que come no es fruto del ocio. Sus hijos se levantan y la felicitan; también su esposo la alaba: «Muchas mujeres han realizado proezas, pero tú las superas a todas».
Proverbios 31:26-29 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Siempre habla con sabiduría, y enseña a sus hijos con amor. Siempre está pendiente de su casa y de que todo marche bien. Cuando come pan, es porque se lo ha ganado. Sus hijos la felicitan; su esposo la alaba y le dice: «Mujeres buenas hay muchas, pero tú las superas a todas».
Proverbios 31:26-29 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Habla siempre con sabiduría, y su lengua se rige por la ley del amor. Siempre atenta a la marcha de su hogar, nunca come un pan que no se haya ganado. Sus hijos se levantan y la llaman dichosa; también su esposo la congratula: «Muchas mujeres han hecho el bien, pero tú las sobrepasas a todas.»
Proverbios 31:26-29 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Habla siempre con sabiduría, y da con amor sus enseñanzas. Está atenta a la marcha de su casa, y jamás come lo que no ha ganado. Sus hijos y su esposo la alaban y le dicen: «Mujeres buenas hay muchas, pero tú eres la mejor de todas.»
Proverbios 31:26-29 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Abre su boca con sabiduría, Y la ley de clemencia está en su lengua. Considera los caminos de su casa, Y no come el pan de balde. Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba: Muchas mujeres hicieron el bien; Mas tú sobrepasas a todas.
Proverbios 31:26-29 La Biblia de las Américas (LBLA)
Abre su boca con sabiduría, y hay enseñanza de bondad en su lengua. Ella vigila la marcha de su casa, y no come el pan de la ociosidad. Sus hijos se levantan y la llaman bienaventurada, también su marido, y la alaba diciendo: Muchas mujeres han obrado con nobleza, pero tú las superas a todas.
Proverbios 31:26-29 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Cuando habla, sus palabras son sabias, y da órdenes con bondad. Está atenta a todo lo que ocurre en su hogar, y no sufre las consecuencias de la pereza. Sus hijos se levantan y la bendicen. Su marido la alaba: «Hay muchas mujeres virtuosas y capaces en el mundo, ¡pero tú las superas a todas!».