Cristianismo ActualMuestra
¿Cómo discernir si algo viene de Dios o no?
En primera instancia, lo que viene de Dios trae paz y bendición, nada que venga de Él nos va a causar preocupación o malestar. Si bien Dios puede permitir ciertas situaciones o sentimientos en nosotros para lograr su exaltación y honra. Está escrito en Apocalipsis 4:11: Digno eres, Señor y Dios nuestro, de recibir la gloria y el honor y el poder, porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas. Tomemos ese versículo como nuestro fin para adorar al Señor, nuestro Dios, sobre todas las cosas y en toda situación, este es el primer mandamiento (Mateo 22:37).
Por otro lado, lo que proviene de Dios no va contrariamente a las escrituras, ni nos genera sentimientos de culpa u otros.
Tomemos en cuenta que cuando hacemos la voluntad de Dios, nos guste o no en el momento preciso, ¡estaremos obedeciendo y agradándole! Y por ello seremos recompensados.
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas (Mateo 6:33).
Porque de Él, por Él y para Él son todas las cosas. A Él sea la gloria para siempre (Romanos 11:36).
INDICIOS
Cuando nos encontramos en un cristianismo de costumbre, detenidamente podemos observar ciertas posturas nuestras como por ejemplo no tener deseos de orar, de ir a los cultos, de escudriñar la palabra de Dios, o de seguir el ejemplo de Jesús.
Debido a esto, se produce un estado anímico distinto al que Dios desea para nosotros, tomamos actitudes tal vez incorrectas y poseemos pensamientos y sentimientos no apropiados.
Nuestra vida da un rotundo cambio, distanciándose de lo que la Biblia certifica. En contexto, comenzamos a ser cristianos solo los domingos o únicamente en los cultos y no en la cotidianidad.
Cuando se dan estas características deberíamos preocuparnos. La solución se encuentra en restaurar la relación con Dios y para ello primero tener la voluntad antes mencionada.
Acerca de este Plan
A lo largo de nuestras vidas podemos llegar a caer espiritualmente, y dejar que nuestra relación con Dios se estanque. Puede ser consecuencia de una situación desagradable, por personas a nuestro alrededor, como por falta de voluntad propia, entre otras. El tema principal del texto se encuentra en cómo avivar la llama del fuego de Dios y mantenerla encendida en el tiempo.
More
Nos gustaría agradecer a Agustina Rojas por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://linktr.ee/agustinarojasbible