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¡Ayuda! ¡Soy Millennial!

DÍA 3 DE 7

NO PODEMOS SERVIR AL DINERO Y A DIOS

Es una realidad que el dinero es una necesidad en este mundo caído, pero su manejo es el resultado de decisiones. Los cristianos sabemos que las decisiones provienen del corazón y que solo a través de ordenar nuestros afectos lo haremos sabiamente.

Jesús enseña a Sus discípulos un principio fundamental en cuanto al manejo del dinero: no se trata de si tienes mucho o poco dinero, se trata de cuánto amas al dinero, y esto se refleja en el uso que le das. Si algo te gobierna, ese es tu señor. Por eso, cuando no tienes dinero o se está agotando, te afanas.

“¿Por qué te preocupas?”, pregunta Jesús. En Mateo 6:25, 31-32 encontramos la respuesta. Jesús compara el cuidado de Dios con Su creación y animales al jamás dejar de proveerles porque son Suyos. ¿Cómo no lo hará con Sus hijos? Por tanto, ¿de qué sirve preocuparnos?

No es tan fácil porque Dios está tratando con nuestros corazones. La espera no es pasiva, más bien, es una espera en fe acompañada de una confianza firme y una acción puntual: “Busquen primero Su Reino y Su justicia” (Mt 6:33a). Por eso. “No se preocupen por el día de mañana” (Mt 6:33b). ¿Por qué? Porque Dios cuida de cada día, el cual tiene su propio afán (Mt 6:34).

Es difícil confiar en Dios cuando la escasez o los problemas te toman el pulso, por eso necesitamos la fe que Él nos da, no para llamar lo que no es como si fuera, sino para llamar a Cristo, quien es el que vino a revelarnos el Reino de Dios, un Reino al cual pertenecemos por la fe y que está lleno de abundancia espiritual para enfrentar cada día.

APRENDE-VIVE-LIDERA

  • Aprende: ¿Qué aprendiste de esta lectura?
  • Vive: Lee todo Mateo 6:25-34 y reescríbelo en tus propias palabras según tu circunstancia.
  • Lidera: Comparte este mensaje.

ORACIÓN

Oremos. Gracias, Señor, porque puedo orar, buscar y encontrarte. Mi situación no te es ajena pero aún así puedo expresar mi necesidad de Ti, mi temor a las circunstancias y el deseo de Tu ayuda. Perdóname por las veces que no he administrado el dinero que me has dado; perdóname por el afán y el temor que me ha sobrevenido. Ayúdame a esperar, confiar y accionar en buscarte y esperar tu provisión. En Jesús, amén.

Escrituras

Día 2Día 4

Acerca de este Plan

¡Ayuda! ¡Soy Millennial!

Un plan de lectura que ayuda a los millennials a reflexionar de manera bíblica en las situaciones que los aquejan.

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Nos gustaría agradecer a Reformadas por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: http://www.reformadas.com/