¡Año Nuevo! ¿Vida Nueva?Muestra

¡Hola querido lector! Que bueno es tenerte con nosotros. Has dicho o has logrado escuchar esta frase, cada vez que un año comienza: ¡Año nuevo, vida nueva!; como vez, los signos de admiración están en ella. Porque lo decimos con alegría, con mucha esperanza. Pero si te fijas en el título de este devocional, no va todo con signos de admiración. ¡No! Va primero: ¡Año Nuevo!, porque sí es una realidad, es un nuevo comienzo de año, cambia las fechas, iniciamos nuevamente con enero, los más jóvenes inician una nueva etapa en sus colegios o semestres en las universidades…y esto marca una diferencia por supuesto.

Pero, la segunda parte de esta expresión tan usada por esta época, ¿es real? ¿Vida nueva?Realmente cuando cambiamos o iniciamos un nuevo año, tenemos una ¿vida nueva? Tenemos una nueva familia, un nuevo trabajo, una nueva casa…¿nuestra vida cambia del 31 de diciembre al 1 de enero? Claro que no, y aunque en la mayoría de las personas en su corazón es este su deseo, realmente la vida nueva no se da, solo por un cambio de fecha, pero sí podemos hacer que nuestra vida nueva sea una realidad.

Durante los siguientes tres días, te invito a que exploremos tres invitaciones, que si las aceptamos, nuestra vida podrá tener la esperanza y sobre todo convertirse en realidad, de que nuestra vida es nueva. Así que te animo a que prepares tu corazón, y dispongas de unos minutos y le digas a Dios: Señor, háblame a mí, sí a mí, no a multitudes, habla a mi corazón de acuerdo a mi necesidad en este nuevo año que comienza.

¡Nos encontramos mañana!