¿Cómo Debo Orar? Aprende a Hablar Con Tu Padre CelestialMuestra

Orando en la verdad

Ayer hablamos de cómo la oración es una forma de adoración cuando va acompañada de acción de gracias y alabanza. También aprendimos que la oración no debe ser un acto religioso, sino palabras llenas del Espíritu y llenas de verdad.

Pero, ¿cómo se ve 'orar en verdad' en nuestra vida diaria? Usemos Efesios 1:3 como ejemplo.

Efesios 1:3
"Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo."

Si la Palabra dice que estás bendecido con "toda" bendición espiritual en los lugares celestiales, eso es la verdad.

Entonces, si oras: "Oh, Dios, ¿podrías bendecirme con bendiciones espirituales?" ¿Es esto orar en verdad? No.

La Palabra dice que "el Espíritu Santo estará con vosotros y en vosotros" y que "sus dones son irrevocables" (Juan 14:17; Romanos 11:29).

Entonces, si oras: "Oh Señor, no quites Tu Espíritu de mí, ven ahora con Tu Espíritu y lléname otra vez", ¿es esto adorar en verdad? No.

¡Debemos orar la verdad que se encuentra en la Palabra de Dios!

Así que, en su lugar, ora de esta manera: (No es necesario que digas las referencias de las Escrituras en voz alta, pero se incluyen para mostrarte que esta oración se basa en la verdad de la Palabra de Dios).

"Señor, me presento ante tu trono con valentía (Hebreos 4:16) para alabarte y adorarte (Juan 4:23). Gracias porque no tengo que preocuparme por nada, sino que puedo darte a conocer todos mis deseos a través de la oración y la súplica, con acción de gracias (Fil. 4:6-7). Gracias porque todas Tus promesas son 'sí y amén' en Cristo Jesús (2 Corintios 1:20). ¡Me regocijo en Ti porque me das todo lo que mi corazón desea (Salmo 37:4)!

Gracias porque me he convertido en templo del Espíritu Santo (1 Corintios 6:19). Gracias porque he sido bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales (Efesios 1:3). Gracias porque la enfermedad no me tocará, porque por Tu llaga soy sanado (Isaías 53:5). Gracias porque el pecado ya no tiene poder sobre mí (Romanos 6:14), porque he sido redimido por la preciosa sangre de Tu Hijo Jesús (Efesios 1:7). Ahora, yo soy Tu hijo amado (Romanos 8:16).

¡Tú haces que abunde en mí toda forma de gracia, para que tenga todo lo que necesito en todo y sea abundante en toda buena obra (2 Corintios 9:8)! Poseo la bendición de Abraham (Gálatas 3:14). ¡Cómo me has mostrado favor, gracias!

¡Gracias porque haces lo que dices que harás (Núm. 23:19) y porque eres Quien dices ser (1 Tesalonicenses 5:24)! Gracias porque te aseguras de que mis hijos no se pierdan (Is. 54:13), gracias porque nos proteges y guardas del mal (Salmo 91:11; Salmo 121:7).

Gracias porque haces prosperar todos mis caminos (Josué 1:8) y porque daré mucho fruto para Tu Reino (Juan 15:5). Pongo a todos mis seres queridos y necesidades en Tus manos amorosas (1 Pedro 5:7).

Te amo, te doy gracias, en el poderoso nombre de Jesús. ¡Amén!"

¿Lo ves?

Eso es adorar en espíritu y en verdad. Mientras oras, di lo que se encuentra en Su Palabra. Agradécele por ello, porque sabes que es la verdad. Así es como das a conocer tus peticiones a Dios con acción de gracias.

Filipenses 4:6
"Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias;"

Activación:
Haz una lista de las cosas por las que quieres orar la próxima semana. Toma un elemento cada día en oración y aplica esta lista de verificación:

• ¿Me estoy acercando al trono de Dios con valentía?
• ¿Estoy orando de acuerdo a la voluntad de Dios? (Pista: ¡La Palabra de Dios es Su voluntad!)
• ¿Estoy orando con fe?
• ¿Estoy dando a conocer mis peticiones con acción de gracias?