Eclesiastés 10:1-3
Eclesiastés 10:1-3 NVI
Las moscas muertas apestan y echan a perder el perfume. Así mismo pesa más una pequeña necedad que la sabiduría y la honra juntas. El corazón del sabio busca el bien, pero el del necio busca el mal. Y aun en el camino por el que va, el necio revela su falta de inteligencia y a todos va diciendo lo necio que es.