Mateo 15:27-28
Mateo 15:27-28 NVI
―Sí, Señor; pero hasta los perros comen las migajas que caen de la mesa de sus amos. ―¡Mujer, qué grande es tu fe! —contestó Jesús—. Que se cumpla lo que quieres. Y desde ese mismo momento quedó sana su hija.
―Sí, Señor; pero hasta los perros comen las migajas que caen de la mesa de sus amos. ―¡Mujer, qué grande es tu fe! —contestó Jesús—. Que se cumpla lo que quieres. Y desde ese mismo momento quedó sana su hija.