HECHOS 22:22-29
HECHOS 22:22-29 BLP
Hasta aquí todos habían escuchado con atención; pero en ese momento comenzaron a gritar: —¡Fuera con él! ¡No merece vivir! Como no dejaban de vociferar, de agitar sus mantos y de arrojar polvo al aire, el comandante mandó que metieran a Pablo en la fortaleza y lo azotasen, a ver si confesaba y de esa forma era posible averiguar la razón del griterío contra él. Pero cuando lo estaban amarrando con las correas, Pablo dijo al oficial allí presente: —¿Tenéis derecho a azotar a un ciudadano romano sin juzgarlo previamente? Al oír esto, el oficial fue a informar al comandante: —Cuidado con lo que vas a hacer; ese hombre es ciudadano romano. El comandante llegó junto a Pablo y le preguntó: —Dime, ¿eres tú ciudadano romano? —Sí —contestó Pablo. —A mí me ha costado una fortuna adquirir esa ciudadanía —afirmó el comandante. —Pues yo la tengo por nacimiento —contestó Pablo. Al momento se apartaron de él los que iban a someterlo a tortura, y el propio comandante tuvo miedo al saber que había mandado encadenar a un ciudadano romano.