ISAÍAS 54:1-10
ISAÍAS 54:1-10 BLP
Alégrate estéril, que no concebías; grita de júbilo, tú que no parías, pues tiene más hijos la abandonada que la casada, dice el Señor. Amplía el espacio de tu tienda, despliega sin reparo tus lonas; alarga tus cuerdas, afianza tus clavijas, pues vas a extenderte a derecha e izquierda: tus hijos heredarán naciones, repoblarán ciudades desiertas. No temas, no serás defraudada, no te apures, no te afrentarán. Olvidarás la vergüenza de tu mocedad, no recordarás la afrenta de tu viudez. Pues tu esposo será tu Creador, su nombre es Señor del universo; tu redentor será el Santo de Israel, llamado Dios de toda la tierra. Como a esposa abandonada y afligida te volverá a llamar el Señor, pues no podrá ser repudiada la esposa de la juventud, —dice tu Dios—. Por un instante te abandoné, pero con gran cariño te acogeré; en un arrebato de cólera te oculté por un momento mi rostro, pero te quiero con amor eterno dice tu redentor, el Señor. Me ocurre como en tiempos de Noé, cuando juré que las aguas del diluvio no inundarían otra vez la tierra: juro ahora no encolerizarme ni volver de nuevo a amenazarte. Aunque se muevan las montañas y se vengan abajo las colinas, mi cariño por ti no menguará, mi alianza de paz se mantendrá dice el Señor, que te quiere.