PROVERBIOS 5:1-6
PROVERBIOS 5:1-6 BLP
Hijo mío, atiende a mi sabiduría, presta oído a mi inteligencia; así conservarás el buen juicio y tus labios guardarán el saber. Los labios de la mujer ajena rezuman miel y su boca es más suave que el aceite; pero acaba siendo amarga como ajenjo y cortante como arma de dos filos. Sus pies se precipitan en la muerte, sus pasos van derechos al abismo. No le preocupa la senda de la vida, camina a la perdición y no lo sabe.