SALMOS 1:1-6
SALMOS 1:1-6 BLP
Dichoso quien no sigue el consejo de los malvados, ni en la senda de los pecadores se detiene, ni en compañía de los necios se sienta, sino que se complace en la ley del Señor sobre la que reflexiona día y noche. Es como un árbol plantado junto al arroyo: da fruto a su tiempo y no se secan sus hojas; consigue todo cuanto emprende. No ocurre así a los malvados, paja que el viento arrastra. No vencerán los malvados en el juicio, ni los pecadores en la asamblea de los justos pues el Señor protege la senda de los justos mientras la senda de los malvados se desvanece.