1 SAMUEL 15:22-35
1 SAMUEL 15:22-35 RV2020
Entonces Samuel dijo: —¿Acaso se complace el Señor tanto en los holocaustos y sacrificios como en la obediencia a las palabras del Señor? Mejor es obedecer que sacrificar; prestar atención es mejor que la grasa de los carneros. Como pecado de adivinación es la rebelión, como ídolos e idolatría es la obstinación. Por cuanto rechazaste la palabra del Señor, también él te ha rechazado para que no seas rey. Saúl dijo a Samuel: —He pecado, pues he desobedecido el mandamiento del Señor y tus palabras, porque temí al pueblo y consentí a la voz de ellos. Perdona, pues, ahora mi pecado. Vuelve conmigo para que adore al Señor. —No volveré contigo, porque rechazaste la palabra del Señor, y el Señor te ha rechazado para que no seas rey sobre Israel —respondió Samuel a Saúl. Samuel se volvió para irse, pero él se asió de la punta de su manto, y este se desgarró. Entonces Samuel le dijo: —El Señor ha desgarrado hoy de ti el reino de Israel y lo ha dado a un prójimo tuyo mejor que tú. Además, el que es la Gloria de Israel no mentirá ni se arrepentirá, porque no es hombre para que se arrepienta. —Yo he pecado; pero te ruego que me honres delante de los ancianos de mi pueblo y delante de Israel, y que vuelvas conmigo para que adore al Señor, tu Dios —dijo Saúl. Volvió Samuel en compañía de Saúl, y adoró Saúl al Señor. Después dijo Samuel: —Traedme a Agag, rey de Amalec. Agag vino hacia él alegremente. Y decía: —Ciertamente, ya pasó la amargura de la muerte. Samuel dijo: —Como tu espada dejó a las mujeres sin hijos, así tu madre quedará privada de su hijo entre las mujeres. Entonces Samuel cortó en pedazos a Agag delante del Señor en Gilgal. Se fue luego Samuel a Ramá, y Saúl subió a su casa en Gabaa de Saúl. Nunca más vio Samuel a Saúl en toda su vida. Y lloraba Samuel por Saúl, porque el Señor se había arrepentido de haberlo hecho rey de Israel.