2 REYES 23:26-37
2 REYES 23:26-37 RV2020
Con todo, el Señor no desistió del ardor de su gran ira, que se había encendido contra Judá por todas las provocaciones con que Manasés lo había irritado. Y el Señor dijo: —También apartaré de mi presencia a Judá, como aparté a Israel, y desecharé a esta ciudad que había escogido, a Jerusalén, y a la casa de la que había dicho: «Allí estará mi nombre». Los demás hechos de Josías, y todo lo que hizo, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá? En aquellos días el faraón Necao, rey de Egipto, subió hacia el río Éufrates al encuentro del rey de Asiria. Contra él salió el rey Josías; pero en cuanto aquel lo vio, lo mató en Meguido. Sus siervos lo pusieron en un carro, lo trajeron muerto de Meguido a Jerusalén y lo sepultaron en su sepulcro. Entonces el pueblo tomó a Joacaz hijo de Josías, lo ungieron y lo proclamaron rey en lugar de su padre. Joacaz tenía veintitrés años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses en Jerusalén. El nombre de su madre era Hamutal, hija de Jeremías, de Libna. E hizo lo malo ante los ojos del Señor, conforme a todas las cosas que sus padres habían hecho. El faraón Necao lo tuvo preso en Ribla, en la provincia de Hamat, para que no reinara en Jerusalén, e impuso al país un tributo de tres mil trescientos kilos de plata y treinta y tres kilos de oro. Entonces el faraón Necao puso como rey a Eliaquim hijo de Josías, en lugar de Josías, su padre, y le cambió el nombre por el de Joacim. A Joacaz lo tomó y se lo llevó a Egipto, donde murió. Joacim entregó al faraón la plata y el oro, pero tuvo que imponer una contribución al país para dar el dinero exigido por la orden del faraón, por lo que sacó la plata y el oro del pueblo, según estimación de la hacienda de cada uno, para darlo al faraón Necao. Joacim tenía veinticinco años cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén. El nombre de su madre era Zebuda, hija de Pedaías, de Ruma. Pero hizo lo malo ante los ojos del Señor, conforme a todas las cosas que sus padres habían hecho.