GÉNESIS 31:1-16
GÉNESIS 31:1-16 RV2020
Jacob oía las palabras de los hijos de Labán, que decían: «Jacob ha tomado todo lo que era de nuestro padre, y de lo que era de nuestro padre ha adquirido toda esta riqueza». Miraba también Jacob el semblante de Labán, y veía que ya no lo trataba como antes. Entonces el Señor dijo a Jacob: «Vuélvete a la tierra de tus padres, a tu parentela, y yo estaré contigo». Envió, pues, Jacob a llamar a Raquel y a Lea al campo donde estaban sus ovejas, y les dijo: —Veo que vuestro padre ya no me mira como antes; pero el Dios de mi padre ha estado conmigo. Vosotras sabéis que con todas mis fuerzas he servido a vuestro padre; pero vuestro padre me ha engañado y me ha cambiado el salario diez veces, si bien Dios no le ha permitido que me hiciera daño. Si él decía: «Los pintados serán tu salario», entonces todas las ovejas parían pintados; y si decía: «Los listados serán tu salario», entonces todas las ovejas parían listados. Así ha quitado Dios el ganado de vuestro padre y me lo ha dado a mí. Sucedió, cuando las ovejas estaban en celo, que alcé yo mis ojos y vi en sueños que los machos que cubrían a las hembras eran listados, pintados y moteados. Y me dijo el ángel de Dios en sueños: «Jacob». Y yo respondí: «Aquí me tienes». Entonces él dijo: «Alza ahora tus ojos, y verás que todos los machos que cubren a las hembras son listados, pintados y moteados, pues yo he visto todo lo que Labán te ha hecho. Yo soy el Dios de Bet-el, donde tú ungiste la piedra y donde me hiciste un voto. Levántate ahora y sal de esta tierra; vuélvete a la tierra donde naciste». Respondieron Raquel y Lea: —¿Tenemos acaso parte o heredad en la casa de nuestro padre? ¿No nos tiene ya por extrañas, pues que nos vendió y hasta se ha comido del todo lo que recibió por nosotras? Toda la riqueza que Dios le ha quitado a nuestro padre es nuestra y de nuestros hijos; ahora, pues, haz todo lo que Dios te ha dicho.