ISAÍAS 28
28
7. Mensajes a los reinos de Israel y Judá (28–33)
Condenación de Efraín
1¡Ay de la corona de soberbia de los ebrios de Efraín
y de la flor caduca de su gloriosa hermosura,
que está sobre la cabeza del valle fértil
de los aturdidos por el vino!
2El Señor tiene a uno que es fuerte y poderoso:
como una tormenta de granizo,
como un torbellino arrasador,
como aguas caudalosas, desbordantes.
Echa violentamente por tierra todo a su paso.
3Con los pies será pisoteada
la corona de soberbia de los ebrios de Efraín.
4Y la flor caduca de la hermosura de su gloria
que está sobre la cabeza del valle fértil,
será como la fruta temprana,
la primera del verano, la cual, apenas la ve el que la mira,
se la traga
tan pronto como la tiene a mano.
5Aquel día, el Señor de los ejércitos
será por corona de gloria
y diadema de hermosura
para el resto de su pueblo.#10.21+.
6Será espíritu de justicia
para el que se sienta a juzgar,
y dará fuerzas
a los que rechazan el asalto a la puerta.
7Pero también a sacerdotes y profetas
el vino extravió,
y la sidra los hizo desvariar;
fueron trastornados por el vino;
se aturdieron con la sidra,
erraron en la visión,
titubearon en el juicio.#3.12+; 5.12+.
8Porque toda mesa está llena
de vómito y suciedad,
hasta no quedar lugar limpio.
9¿A quién se habrá de instruir?,
o ¿a quién habrá que explicar el mensaje?
¿A los destetados?
¿A los recién destetados?
10Porque mandamiento tras mandamiento,
mandato sobre mandato,
renglón tras renglón,
línea tras línea,
un poquito aquí, un poquito allá,
11porque en lengua de tartamudos,
en idioma extraño,
hablará a este pueblo.
12A ellos ha dicho: «Este es el reposo;
dad reposo al cansado.
Este es el alivio»,
mas no han querido escuchar.#1 Co 14.21.
13La palabra, pues, del Señor les será
mandamiento tras mandamiento,
mandato tras mandato,
renglón tras renglón,
línea tras línea,
un poquito aquí, un poquito allá;
hasta que vayan y caigan de espaldas,
y queden heridos, y sean atrapados y llevados prisioneros.
Amonestación a Jerusalén
14Por tanto, gente burlona
que gobernáis a este pueblo
que está en Jerusalén,
oíd la palabra del Señor.
15Vosotros habéis dicho:
«Hemos hecho un pacto con la muerte;
un convenio tenemos con el seol.
Cuando pase el torrente del azote,
no llegará a nosotros,
porque hemos puesto nuestro refugio en la mentira
y en la falsedad nos esconderemos».
16Por eso, el Señor dice así:
Yo he puesto en Sion
por fundamento una piedra,
piedra probada,
angular, preciosa,
de cimiento estable.
El que crea, no se tambaleará.#7.9+; 8.14. Citado en Ro 9.33; 10.11; 1 P 2.6. Cf. también Ef 2.20.
17Utilizaré como plomada el derecho,
usaré como nivel la justicia.
El granizo barrerá el refugio de la mentira
y las aguas inundarán el escondrijo.
18Y será anulado vuestro pacto con la muerte,
y vuestro convenio con el seol no será firme;
cuando pase el torrente del azote,
seréis por él pisoteados.#8.7-8.
19Luego que comience a pasar,
él os arrebatará,
porque de mañana en mañana pasará,
de día y de noche;
y será ciertamente un espanto el entender lo oído.
20La cama será corta para poder estirarse,
y la manta estrecha para poder envolverse.
21Porque el Señor se levantará como en el monte Perazim,
como en el valle de Gabaón#2 S 5.20; 1 Cr 14.11; Jos 10.9-12. se enojará,
para hacer su obra, su extraña obra,
y para efectuar su trabajo, su extraño trabajo.
22Ahora, pues, no os burléis,
para que no se aprieten más vuestras ataduras;
porque me ha hecho saber Dios,
el Señor de los ejércitos,
acerca de la destrucción decretada,
sobre toda la tierra.#10.22-23.
23Estad atentos y oíd mi voz;
atended y oíd mi dicho:
24El que ara para sembrar,
¿arará todo el día?
¿Solo romperá y quebrará los terrones de la tierra?
25Cuando ya ha preparado su superficie,
¿no esparce el eneldo, siembra el comino,
pone el trigo en hileras,
la cebada en el lugar señalado
y la avena en su borde apropiado?
26Porque su Dios lo instruye
y le enseña lo recto:
27que el eneldo no se trilla con trillo,
ni sobre el comino se pasa rueda de carreta;
sino que con un palo se sacude el eneldo,
y el comino con una vara.
28El grano se trilla;
pero no lo trillará por siempre,
ni lo aplasta con la rueda de su carreta,
ni lo tritura con los dientes de su trillo.
29¡También esto proviene del Señor de los ejércitos,
que aconseja admirablemente,
y es grande en sabiduría!
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ISAÍAS 28: RV2020
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Antigua versión de Casiodoro de Reina (1569), revisada por Cipriano de Valera (1602). Revisiones anteriores con la participación de Sociedad Bíblica de España: 1862, 1909, 1960 y 1995.