ISAÍAS 50:4-8
ISAÍAS 50:4-8 RV2020
El Señor me ha dado lengua de sabios para saber hablar palabras al cansado; despertará mañana tras mañana, despertará mi oído para que escuche como los sabios. El Señor me ha abierto el oído, y no he sido rebelde ni me he vuelto atrás. He dado mi cuerpo a los que me herían, y mis mejillas a los que me arrancaban la barba; no he apartado mi rostro de injurias y de escupitajos. Porque el Señor me ayuda, no me he avergonzado; por eso he puesto mi rostro como un pedernal, y sé que no seré avergonzado. Mi salvador está cerca de mí: ¿quién se atreve a contender conmigo? ¡Comparezcamos juntos! ¿Quién es el que quiere acusarme? ¡Que se acerque a mí!