JUAN 4:19-28
JUAN 4:19-28 RV2020
Le dijo la mujer: —Señor, veo que tú eres profeta. Nuestros padres adoraron a Dios en este monte, pero vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar a Dios. Jesús respondió: —Mujer, créeme que está llegando la hora en que ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre. Vosotros los samaritanos adoráis algo que desconocéis; sin embargo, nosotros, sí lo conocemos, ya que la salvación viene de los judíos. Pero el momento ha llegado: ahora es cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque el Padre busca tales adoradores. Dios es Espíritu y es necesario que quienes le adoran lo hagan en espíritu y en verdad. Le dijo la mujer: —Sé que ha de venir el Mesías, llamado el Cristo. Cuando él venga nos explicará todas las cosas. Jesús declaró: —Soy yo, el que habla contigo. En esto llegaron sus discípulos y se asombraron de que hablara con una mujer. Sin embargo, ninguno le preguntó qué pretendía o de qué hablaba con ella. Por su parte, la mujer dejó allí su cántaro, fue a la ciudad y dijo a la gente