APOCALIPSIS 12:7-17
APOCALIPSIS 12:7-17 RV2020
Entonces hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón. Luchaban el dragón y sus ángeles, pero no pudieron vencer, y ya no hubo más lugar para ellos en el cielo. Y así fue expulsado el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama Diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero. Tanto él como sus ángeles fueron arrojados a la tierra. Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: —Ahora ha venido la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios y la autoridad de su Cristo, porque ha sido expulsado el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche. Ellos mismos lo han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra de testimonio que dieron; pues menospreciaron sus vidas hasta la muerte. Por lo cual alegraos, cielos, y los que habitáis en ellos. ¡Ay de los habitantes de la tierra y del mar!, porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, pues sabe que tiene poco tiempo. Cuando el dragón vio que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón. Pero a la mujer se le dieron las dos alas de la gran águila para que volara al desierto, lejos de la serpiente, al lugar donde sería mantenida durante tres años y medio. Entonces la serpiente arrojó mucha agua por su boca, como si fuera un río, para que la mujer fuera arrastrada por la corriente. Pero la tierra ayudó a la mujer, pues la tierra abrió su boca y se tragó el río que el dragón había arrojado por su boca. Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer y se fue a hacer la guerra contra el resto de la descendencia de ella, contra los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo.